Inundado un colegio de religiosos en Ontanyent: "el agua subió dos palmo en la planta baja y derribó el muro de entrada" Cáritas Gandia atiende a 31 personas sin hogar en dos noches por el temporal de lluvia

Derrume de el muro de un colegio de religiosos en Ontanyent
Derrume de el muro de un colegio de religiosos en Ontanyent

Estas 31 personas se han sumado estas dos noches a los 14 residentes temporales de la residencia del CAI “y todos ellos reciben desayuno, comida y cena, pueden usar las duchas, como de costumbre, y una vez pasan la noche pueden permanecer en el Centro de Día”

En Ontinyent “afortunadamente la zona más afectada tiene pocas casas habitadas y los servicios municipales se han encargado de atender las incidencias”, ha indicado Juan Melchor Seguí, párroco de Santa María

El Centro de Atención Integral (CAI) de Cáritas Gandia ha atendido en sus instalaciones a 31 personas sin hogar en las últimas dos noches a causa de las fuertes lluvias y mantendrá activado su protocolo de emergencias mientras esté vigente la alerta por temporal.

Ante situaciones de emergencia el CAI activa un dispositivo especial y mantiene sus instalaciones abiertas “para que las personas sin hogar puedan venir y pernoctar, para lo cual se preparan colchones, sacos de dormir, sábanas y toallas y se habilita la zona del comedor para atenderles”, han informado desde el Centro de Atención Integral.

Estas 31 personas se han sumado estas dos noches a los 14 residentes temporales de la residencia del CAI “y todos ellos reciben desayuno, comida y cena, pueden usar las duchas, como de costumbre, y una vez pasan la noche pueden permanecer en el Centro de Día”, han concluido.

Dos palmos de agua en pasillos y aulas del colegio de los franciscanos en Ontinyent

Por su lado, la comunidad de 13 religiosos franciscanos de Ontinyent achica desde primera hora de hoy el agua que ayer inundó las instalaciones del colegio. En la Concepción, regido por la Orden, la lluvia afectó a toda la planta baja, los dos claustros, los comedores, la cocina, las aulas y los pasillos, “donde el agua subió hasta dos palmos”, ha explicado el franciscano José Antonio Jordá, que fue superior provincial de los franciscanos en Valencia durante seis años.

Además, se derrumbó el muro de la entrada principal al colegio, que cayó por completo arrastrando parte de un muro lateral. Posteriormente una máquina “retiró los bloques que cayeron, de manera que la entrada al colegio está despejada para que puedan entrar y salir vehículos”, ha asegurado.

La previsión es “si la lluvia cesa este fin de semana, recuperar la normalidad para poder abrir este lunes el centro, donde estudian más de 900 alumnos”, según Jordá, que ha confirmado que en la iglesia “donde también entró agua, no ha habido graves desperfectos como tampoco se ha visto afectado el nuevo pabellón deportivo que se inauguró en el centro hace unos meses”.

Asimismo, en Ontinyent “afortunadamente la zona más afectada tiene pocas casas habitadas y los servicios municipales se han encargado de atender las incidencias”, ha indicado Juan Melchor Seguí, párroco de Santa María, que ha señalado que las parroquias de la localidad no se han visto dañadas.

En Moixent, voluntarios de la asociación San Vicente de Paul junto con el párroco de San Pedro Apóstol, Lisardo Castelló, han visitado a varias familias, sobre todo a personas mayores y enfermos, “para llevarles alimentos y ver cómo se encuentran ya que no han podido salir de casa por las fuertes lluvias y el Ayuntamiento alertó del peligro de desplazarse”, ha subrayado el párroco, que ha añadido que “es una labor que hacemos habitualmente pero esta semana de manera extraordinaria por las lluvias”.

Volver arriba