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La economista, primera mujer consejera de Estado de Economía del Vaticano, abre el congreso de DSI en la Fundación Pablo VI Alessandra Smerilli: "Los pobres siempre son los que pagan el precio más alto"

Alessandra Smerilli, durante su intervención
Alessandra Smerilli, durante su intervención

"El problema de hoy no es el mercado, sino los oligopolios, el poder, que haya vencedores y vencidos, explotadores y explotados"

"No es correcto denunciar el sistema y luego no preocuparnos de cómo se usa nuestro dinero. Si nuestros bancos financian la venta de armas, o proyectos con gran impacto medioambiental estamos siendo cómplices de guerras o cambio climático"

Atilano Rodríguez: "Todos somos misión. No solo tenemos el encargo de evangelizar, sino que nuestra vida, actos palabras... son ya manifestaciones del Evangelio y actividades misioneras"

Esta tarde se presentará el Encuentro 2020 “La Economía de Francisco” que congregará en Asís los días 26 y 28 de marzo del próximo año a jóvenes economistas de todo el mundo para trabajar en la construcción de una economía que incluya y no excluya, que de vida y no mate al hombre

Jesús Bastante

“La economía civil, una economía para las personas”. Este ha sido el lema escogido por la XXVI Curso de Doctrina Social de la Iglesia, que esta mañana ha arrancado en la Fundación Pablo VI con una jugosa conferencia de la secretaria de Estado de Economía de la Ciudad del Vaticano, Alessandra Smerilli.

"Los pobres siempre son los que pagan el precio más alto", denunció, echando mano de Laudato Si. "El grito de los pobres y el de la Tierra es el mismo grito, no podemos escuchar uno y no el otro", destacó la experta, que denunció cómo "el problema de hoy no es el mercado, sino los oligopolios, el poder, que haya vencedores y vencidos, explotadores y explotados".

"No es correcto denunciar el sistema y luego no preocuparnos de cómo se usa nuestro dinero. Si nuestros bancos financian la venta de armas, o proyectos con gran impacto medioambiental estamos siendo cómplices de guerras o cambio climático"

Curva de la indiferencia

Así, desveló la existencia de una "curva de la indiferencia". Y es que, aunque con los datos en la mano, la pobreza extrema se ha reducido mucho en los últimos años, “no se ha hecho de manera igual en todo el mundo”. “Por eso, muchos hablan hoy de un mundo del 1%”, recalcó Smerilli. ¿Qué supone esto? “Que los ingresos del 1% de la población, los más ricos, crecen tres veces más que los del resto”, y se sigue fomentando la desigualdad y la brecha entre ricos y pobres.

Apertura del curso de DSI en la Pablo VI
Apertura del curso de DSI en la Pablo VI

"Hoy, la diferencia entre ricos y pobres es como la de un elefante y una hormiga, no es suficiente con hablar de desigualdad", recalcó Smerilli, quien insistió en que este problema "no es sólo económico, sin de posibilidades de recibir educación o de participar en la vida democrática de una nación".

Crisis climática y pobreza

La pobreza, como incidió, vinculada en la crisis climática y la falta de recursos naturales. "La sostenibilidad es el tema de la economía y de la sociedad". "Sólo hay una sostenibilidad, como denuncia Laudato Si. El grito de los pobres y el de la Tierra son el mismo grito, lo vemos en la Amazonía. Tenemos un Sínodo ahora, si hay un problema de recursos naturales, son los pobres quienes van a pagar el precio más alto de esto", denunció la economista.

"Cuando hacemos algo para resolver estos problemas, son los pobres los que tienen que pagar", insistió, poniendo el ejemplo de la lucha contra la contaminación en las grandes ciudades. "Si impedimos circular a los coches antiguos para mejorar el aire, quienes pagan son los pobres, los que no pueden pagarse un coche nuevo".

Economía civil "católica"

La religiosa, primera mujer consejera de Estado de Economía del Vaticano, es una 'rara avis' en un mundo dominado por hombres ancianos. A sus 45 años, esta hija de María Auxiliadora yprofesora de Economía en la Pontificia Facultad de Ciencias de la Educación “Auxilium” de Roma, apostó por una economía ecológica e integral, respetuosa con el medio ambiente y los derechos humanos, y por unas finanzas transparentes y coherentes, que vayan orientadas al desarrollo de las personas.

"Todo esto nos dice que hace falta una economía civil", concluyó. "Es un laboratorio de práctica en el que vemos cómo personas pueden hacer un nuevo estilo de economía, que no se basa en el individuo a pesar de la comunidad", que "se relaciona socialmente, y es católica, universal, para todos". Una economía "que ve el mercado con una visión cooperativa"

Atilano: "No callar ante las injusticias"

La economista estuvo acompañada por el presidente de la Comisión Episcopal de Pastoral Social, Atilano Rodríguez, y el coordinador del curso, Enrique Lluch.

En su saludo, Atilano mostró su deseo de que la Iglesia “descubra que la acción evangelizadora ha de estar centrada en la misión ad gentes, a quienes no conocen aún el Evangelio”. El Papa “plantea una visión misionera de la Iglesia”, teniendo en cuenta que “todos somos misión”. “No sólo tenemos el encargo de evangelizar, sino nuestra vida, actos, palabras... son ya manifestaciones del Evangelio y actividades misioneras”, recalcó.

Así, el prelado invitó a "no callar ante las injusticias y centrar su preocupación en el ser humano. Desde ahí, tiene mucho sentido el congreso que ahora se inicia. Ayudar a otros a crecer como personas y como creyentes".

Esta tarde, a las 19,30, se presentará el Encuentro 2020 “La Economía de Francisco” que congregará en Asís los días 26 y 28 de marzo del próximo año a jóvenes economistas de todo el mundo para trabajar en la construcción de una economía que incluya y no excluya, que de vida y no mate al hombre.

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