Pese a que la diócesis admitió la titularidad aragonesa El obispo de Lleida dice ahora que 83 de las 111 obras de Sijena "son de propiedad catalana"

Los obispos de Barbastro (Pueyo), Lleida (Giménez) y emérito de Barbastro (Milián)
Los obispos de Barbastro (Pueyo), Lleida (Giménez) y emérito de Barbastro (Milián)

Pérez Pueyo: "Hubiera deseado no tener que denunciar a la diócesis de Lleida"

El primer juicio civil que enfrenta a dos diócesis cuenta con la declaración de tres obispos: Pueyo, Giménez y Milián

Lo nunca visto. Los juzgados de Barbastro han visto cómo esta mañana dos diócesis se enfrentaban, por primera vez en la historia, por vía judicial, para dirimir el destino de 111 obras de arte, los denominados 'Bienes de Sijena', pertenecientes a parroquias altoaragonesas pero retenidas en el Museo de Lleida.

"Hubiera deseado no tener que denunciar a la diócesis de Lleida", apuntaba a los medios el obispo de Barbastro-Monzón, Ángel Pérez Pueyo, antes de entrar a declarar. Por su parte, el prelado de Lleida, Salvador Giménez, ha restado validez a la declaración efectuada por la diócesis en la que se reconocía que la titularidad correspondía a Aragón, y ahora tratará de demostrar que 83 de las piezas son catalanas. 

Nueva documentación

Giménez admitió que en el acto de conciliación previo a la celebración del juicio reconoció la propiedad aragonesa de las piezas, pero que la ley civil de patrimonio de Cataluña le impedía devolverlas. Al tiempo, apuntó que su decisión de afirmar que 83 de las piezas son de la Diócesis de Lleida se debe a la aparición de "toda una documentación que se presentó (en los tribunales vaticanos), pero que no se leyó ni se tuvo en cuenta".

Pueyo y Giménez, antes de comenzar la sesión del juicio

"No puedo ir contra la ley civil", añadió el obispo para justificar su decisión de no haber hecho ninguna gestión para devolver los bienes en cumplimiento de las sentencias de los tribunales romanos.

Por su parte, el obispo de Barbastro recordó que el objetivo de la demanda es "poner fin" a un litigio que se remonta a 1995 y que Roma ya ha fallado. “Intenté el diálogo por todos los medios, incluso con un acto de conciliación que propuse con toda intención, pero no pudo ser”.

Todas las sentencias dan la razón a Aragón

Ante las preguntas de los letrados, Ángel Pérez recordó que “hasta ahora todas las sentencias eclesiásticas y civiles han confirmado que la propiedad de las piezas es de las parroquias aragonesas”, señalando que “nunca, hasta este juicio”, nadie había reclamado que 83 piezas fueran propiedad catalana, ni tampoco ha tenido acceso a ningún documento que así lo acredite.

Finalmente, el obispo emérito de Barbastro - Monzón, Alfonso Milián, ha confirmado en su comparecencia que en dos ocasiones firmó sendos documentos en los que el administrador apostólico de Lérida, Javier Salinas, y posteriormente el obispo de Lérida, Joan Piris, reconocieron que la propiedad de las obras de arte era de la diócesis de Barbastro - Monzón, pero que el Consorcio del Museo de Lérida les impedía sacar los bienes.

Los obispos, en el juicio

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