Nuevo libro de Urbano Sánchez Atardecer a los 65-75 años
(Antonio Aradillas).- Educar es siempre bueno, muy bueno. También lo es "reeducar", pero con la ventaja-desventaja de que esta última tarea resulta más enojosa, ardua y difícil que la anterior.
La educación- reeducación es vida y una y otra, en su diversidad de épocas y facetas, se acompasan, y han de caminar estrechamente unidas. Jamás podrá aseverarse con honradez científica que "ya se es y se está educado" para su "atardecer", es decir, para la vejez, en la comprensiva pluralidad de acepciones, y al dictado de la buena voluntad, oficial, oficiosa, familiar o social.
Y gran parte de esta tarea- ministerio es la que afronta Urbano Sánchez García , con la publicación del libro "Atardecer a los 65-75 años", editado por "DM". Con sabiduría, experiencia, sensatez y evangelio, en su "Presentación" refiere el autor que "para escribir esta obra me inspiré en lo que leí, observé, escuché y experimenté, pues escribo pasados ya los ochenta".
Como es comprobable con facilidad, las fuentes de inspiración de sus 124 páginas no pueden ser más directas, nítidas, convincentes y veraces, tachonadas con citas como estas: " Las puestas de sol son tan hermosas, que dan la impresión de cómo si estuviéramos mirando ya a través de las puertas del cielo", o "la soledad añade belleza a la vida, poniendo especial quemadura en las puestas de sol que hace que el olor al aire y a la brisa de la noche, la mejore...", terminando con otra suscrita por Mahatma Gandhi, afirmando que "cuando admiro la maravilla de una puesta de sol, o la belleza de la luna, mi alma crece para adorar al Creador ", sin dejarse en el tintero proclamar con san Juan de la Cruz que "en el atardecer de nuestra vida seremos juzgados sobre el amor..."
Para alcanzar y disfrutar de la reeducación exigida para vivir los últimos años, el autor oferta estos consejos activos: "planifica las tareas, añade otras posibilidades, recaba una preparación psicológica, asegura el porvenir económico, cuida la salud, proyecta un plan que te entusiasme día a día, planifica la vejez, prevé sus posibles crisis psicológicas, busca más a Dios y al prójimo y mira y prepara el examen futuro".
"¿Qué modelo de vida prefieres?", es capítulo de refulgente interés en el libro, desde planteamientos cristianos de verdad "hacia el paradigma ideal que es Cristo", y cuya fórmula la define y describe centrada en el amor (agapetonía), en en entorno de la acción (praxotonía) y polarizada en el deber o deontotonía.
"Ayudar, dejarse ayudar, amar y servir, respeto, reconocimiento- valoración, recompensa proporcionada a quienes te sirven, gratitud y confianza en Dios" coronan el rosario de los misterios que contiene la vejez cuando fue y es reeducada con las enseñanzas contenidas y vividas en el libro del "Atardecer" , que a tantos lectores les proporcionará la impresión feliz de que igualmente "Amanecer" pudiera haberle servido de título y de referencia tanto bíográfica como como bibliográfica.
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