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Los obispos, preocupados por la “crisis de los chalecos amarillos” La Iglesia francesa abrirá sus parroquias para estimular el debate entre la ciudadanía

(Jesús Bastante).- Ante la "crisis de los chalecos amarillos" y el aparente vacío de poder, los obispos franceses han decidido abrir su red de parroquias para estimular el debate entre la ciudadanía.

Esta es una de las principales propuestas de la reunión del Episcopado del país galo, ante "el malestar, profundo y prolongado, que genera una gran desconfianza en los líderes políticos".

En un mensaje lanzado a los católicos y a la ciudadanía francesa, los obispos admiten que "todo el mundo se siente más o menos confuso", y auguran que el final de esta crisis "será difícil, porque lo que está en juego es nuestra capacidad colectiva de esperar y construir el futuro".

"Como escribimos hace dos años, 'uno tendría que ser sordo o ciego para no ser consciente del cansancio, las frustraciones, a veces los miedos e incluso la ira, intensificada por los ataques y la agresión que habita'", constata el escrito episcopal, que sostiene que "una parte importante de los habitantes de nuestro país expresa expectativas y deseos profundos de cambio".


Sin embargo, "encontramos que nuestra democracia carece de lugares de intercambio y reflexión que podrían permitir el surgimiento en gran escala de sugerencias positivas desarrolladas en conjunto". Para los obispos, es significativo "el debilitamiento de muchos partidos políticos y la disminución en la participación sindical".

"¿Dónde encontrarán nuestros ciudadanos lugares apropiados para este trabajo urgente?", se pregunta la Iglesia, que contesta con la "red de miles de parroquias, distribuidas en todo nuestro territorio y ricas en presencia de múltiples movimientos, capellanías y asociaciones de fieles".

Aunque una parroquia es "lugar de oración, especialmente litúrgica, la parroquia es también por naturaleza y vocación la casa de familia fraterna y acogedora para todos". Por ello, proponen su apertura para "ayudar a nuestra sociedad en general a superar la crisis que atraviesa". 

"Sin reemplazar a los políticos, la Iglesia ofrece un espacio para hacer crecer la fraternidad", añaden los obispos, que apuntan posibles preguntas para el debate:

1 / ¿Cuáles son las principales causas de la incomodidad actual y las formas violentas que ha tomado?
2 / ¿Qué podría hacer que los ciudadanos de nuestra democracia se sientan más involucrados en las decisiones políticas?
3 / ¿Qué lugares u organismos intermediarios favorecerían esta participación?
4 / ¿Qué "bien común" buscamos juntos podrían federar a nuestros conciudadanos y convertirlos hacia el futuro?
5 / ¿Qué motivos de esperanza desea transmitir a sus hijos y nietos?




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