El cardenal de Madrid presenta el Encuentro Mundial por la paz de Sant Egidio Carlos Osoro: "Construyamos casas, no fortalezas"

Osoro, con Marco Impagliazzo
Osoro, con Marco Impagliazzo

"Madrid es una ciudad sin fronteras, una ciudad de acogida, donde no nos cuesta encontrarnos unos a otros, una ciudad hecha de identidades culturales diversas, donde la paz se hace visible", afirma el arzobispo de Madrid

El presidente de la Comunidad de Sant'Egidio, Marco Impagliazzo, anuncia una petición formal a la Comisión Europea para implantar los corredores humanitarios en toda la UE

"Madrid es una ciudad sin fronteras, una ciudad de acogida, donde no nos cuesta encontrarnos unos a otros, una ciudad hecha de identidades culturales diversas, donde la paz se hace visible". El cardenal de Madrid, Carlos Osoro, presentó esta tarde el encuentro Paz sin Fronteras: Religiones y Culturas en Diálogo, organizado por el Arzobispado y la Comunidad de Sant Egidio, y que convertirá, del 15 al 17 de septiembre, la capital de España en la capital mundial de la paz.

Un encuentro que reunirá a más de 300 expertos de distintas religiones, pero también del mundo de la educación, la cultura y el pensamiento, todos unidos en torno a un objetivo común: la paz. Una paz que, 30 años después de la caída del Muro de Berlín, parece más necesaria que nunca.  

Así lo quiso argumentar Marco Impagliazzo, presidente de la Comunidad de Sant'Egidio. “Hace 30 años cae el Muro de Berlín, y toda Europa recobró su libertad. La caída del Muro ha significado mucho en la historia de todo el mundo, una nueva esperanza”.

Sin embargo, tantas guerras que atraviesan el mundo y, especialmente, el 11-S, marcaron un antes y un después. “Un muro cayó, pero otros muros, algunos más visibles, otros invisibles, surgieron”.

¿Qué muros hay hoy? “El que más nos conmueve es el muro del Mediterráneo, que separa el norte del sur del mundo”, un muro que explica cómo “el tema de la inmigración no se afronta de manera seria”. También el de EEUU “para prevenir la inmigración desde Sudamérica”, o los que, hoy más que nunca, “siguen separando a los ricos de los pobres, la desigualdad crece”.

Que las fronteras puedan ser superadas

“Nosotros trabajamos para que estas fronteras que dividen puedan ser superadas, y la paz es la palabra que puede superar las fronteras”, declaró Imagliazzo. “El mundo está dividido, pero también más unido. No es Dios quien divide mientras el mundo pide ayuda (…). El mundo debe convertirse en una casa común”.

Una idea en la que abundó el cardenal de Madrid, recalcando que “todos necesitamos una casa, pero no una fortaleza”. “Hagamos casas, no fortalezas”, subrayó. “No podemos poner en nuestro corazón alambradas ni muros”.

Presentación del acto
Presentación del acto

Madrid es una ciudad sin fronteras, una ciudad de acogida, donde no nos cueste encontrarnos unos a otros, una ciudad hecha de identidades culturales diversas. Madrid es una ciudad sin fronteras, donde la paz se hace visible”, subrayó el cardenal de Madrid, quien soñó con “hacer posible que no hagamos muros, que hagamos puentes. Es posible, y es urgente, hacer de este mundo una casa. Y dejarnos de peleas”. Para ello, "sólo lo vamos a poder conseguir si dialogamos juntas todas las religiones". 

“Este encuentro no es la ONU de las religiones”, quiso aclarar el responsable de Sant'Egidio, que espera un mensaje final por parte del Papa Francisco.

Corredores humanitarios

Para Impagliazzo, es preciso trabajar por “tener esa casa común, donde todos puedan tener un hogar, con normas, con capacidad de integrar”, para que no haya tantos muertos en el Mediterráneo. Así, abogó por la experiencia de los corredores humanitarios en Italia, Francia, Bélgica y Andorra., promovida por la comunidad, y que en España no acabaron de fructificar. “Lo propusimos a la nueva presidenta de la Comisión Europea”, anunció Marco.

Osoro, con Impagliazzo
Osoro, con Impagliazzo

Volver arriba