La eliminación del Secreto Pontificio tendrá efecto retroactivo Monseñor Juan Ignacio Arrieta: El secreto pontificio pretende que determinadas noticias no circulen entre sujetos que no tienen derecho a conocerlas

Monseñor Juan Ignacio Arrieta: El secreto pontificio pretende que determinadas noticias no circulen entre sujetos que no tienen derecho a conocerlas
Monseñor Juan Ignacio Arrieta: El secreto pontificio pretende que determinadas noticias no circulen entre sujetos que no tienen derecho a conocerlas VLG

Arrieta contó con la confianza de Benedicto XVI  que Francisco ha mantenido

La noticia de la eliminación del “Secreto Pontificio” para los casos de pederastia en la Iglesia ha sido acogida con satisfacción en gran parte de la sociedad y de la comunidad cristiana católica, es decir universal. 

Para conocer algo más de esta figura, la del “Secreto Pontificio”, hemos acudido a uno de los máximos expertos en materia legislativa en la Iglesia, el vitoriano monseñor  Juan Ignacio Arrieta Ochoa de Chinchetru, que desde 2007 desempeña el cargo de secretario del Pontificio Consejo para los Textos Legislativos y que en 2013 fue elegido por el papa Francisco coordinador de la comisión para la reforma del Instituto para las Obras de Religión, también conocido como Banco Vaticano. Una voz autorizada de la Iglesia para conocer qué es el Secreto Pontificio:  “El secreto pontificio es un deber que se adquiere de no divulgar determinadas noticias que se conocen en razón del cargo que se ocupa. Es un tipo de secreto de oficio (secreto profesional en razón del cargo), que en derecho canónico tiene un régimen disciplinar más severo para quien lo viola. Normalmente está vinculado a determinados cargos (obispos, oficiales de curia o tribunales eclesiásticos, etc.); se refiere a materias determinadas (nombramientos episcopales en curso, conversaciones con Estados, leyes en proceso de elaboración, ecc.), y normalmente se adquiere esa obligación con un juramento promisorio de obligarse a respetar el secreto, cuando se asumen determinados cargos. Todo ello está detallado en una Instrucción de la Santa Sede de 1974 que se llama “Secreta continere”.”

Pero cuál es el objeto de este “Secreto Pontificio”: El secreto pontificio, como cualquier secreto de oficio (normales en toda profesión y cargo público), pretende que determinadas noticias no circulen entre sujetos que no tienen derecho a conocerlas, y tratan de proteger, según los casos, intereses diversos: que no haya interferencias en negociaciones, tutelar la buena fama de las personas, evitar presiones ilegitimas en la toma de decisiones, etc.”

Esta decisión del Papa Francisco ¿Tiene efectos retroactivos? “Si, claro que tiene efecto retroactivo, en el sentido que las cuestiones sobre denuncias, procesos y demás relativos a los delitos contra menores que se indican, ahora quedan bajo el normal secreto de oficio, que es igualmente obligatorio, porque obliga a no dar información a quienes no tienen título para tener esa información. El deber de reserva sigue existiendo, como sucede en cualquier caso análogo, si no fuera así habría lesión de la intimidad y de la buena fama de todos los implicados, lo cual es inmoral e ilícito.”

Entonces ¿cuál podemos decir que es la novedad de la decisión del Papa Francisco?

“La novedad principal es que ahora, esta norma se vivirá con mayor fluidez, y a quienes tengan derecho se facilitarán los datos oportunos sin la rigidez que comportaba (también desde el punto de vista psicológico) el que hubiera por medio un “secreto pontificio”.”

Non solum sed etiam

La verdad os hará libres. No tengo nada que decir. Gracias una vez más Padre Francisco.

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