ENTREVISTA: Primera mujer consejera de Estado de Economía del Vaticano Alessandra Smerilli: "El Papa es un profeta de este tiempo. Y, como todos los profetas, no siempre es comprendido"

Alessandra Smerilli, después de la entrevista
Alessandra Smerilli, después de la entrevista

"Francisco vive simplemente el Evangelio, lo vive verdaderamente, casi al pie de la letra, y por esto, como le pasó a Jesús en su tiempo, puede fastidiar a algunos", subraya la economista salesiana, la única mujer en el corazón de las finanzas de la Santa Sede

"Que sea la primera vez que se nombra a una mujer para este puesto es un bello signo. Se trata de abrir puertas, porque cuando se da un primer paso ya no se puede volver atrás"

"Lo importante no es tanto ocupar espacios o reivindicar un papel, sino lograr trabajar de igual a igual, juntos. La realidad es que Dios ha confiado el mundo al hombre y a la mujer". Alessandra Smerilli es una economista de 45 años, Hija de María Auxiliadora, a la que el Papa Francisco nombró el pasado mes de abril consejera de Estado de Economía de la Ciudad del Vaticano.

Hoy por hoy, es la mujer con más 'peso' en las estructuras vaticanas, aunque ella no se reivindica como mujer con puesto de mando, sino como una economista, que lleva años trabajando para aportar sus talentos a la transparencia en la Iglesia. Smerilli, que esta semana ha visitado nuestro país para inaugurar el curso de Doctrina Social de la Iglesia en la Fundación Pablo VI, recibe a RD momentos antes de dar su conferencia, sobre "Una economía civil, una economía al servicio de las personas".

¿Qué sintió cuando el Papa le encargó dirigir la economía del Estado vaticano?

Lo primero, una gran sorpresa, porque no lo esperaba en absoluto. Segundo, sentí mucha responsabilidad y confianza por parte de la Iglesia, que había pensado en mí para desempeñar esta labor. He pensado que es un bello signo que sea la primera vez en que se nombra a una mujer en este rol. Cuando se da un primer paso ya no se puede volver atrás. Gratitud por esto, porque se trata de abrir puertas.

¿Cómo se ve una mujer en un mundo tradicionalmente gobernado por hombres?

Estoy bastante habituada, porque desde hace tiempo trabajo en organismos eclesiales...

Pero la Curia es la curia...

Creo que el mejor modo de trabajar es no hacer diferencias, llevarlo con normalidad, con las propias competencias y tratando de llevar a cabo el trabajo de la mejor manera posible. Hay que minimizar esto. Pienso que hay que trabajar normalmente, no por ser mujer...

¿Su nombramiento y el de otras mujeres supone un camino de no retorno hacia la igualdad entre hombres y mujeres en la toma de decisiones en la Iglesia?

Pienso que sí, que es importante y espero que no se quede aquí. Como digo siempre, no es una cuestión de ocupar espacios, como reivindicación, sino que se trata- y esto lo dice el Papa Francisco constantemente- de trabajar juntos. Yo soy economista, cuando se piensa en el trabajo o en la organización, esto no debería ocurrir de otro modo, aunque es cierto que históricamente la mujer en la Iglesia se ha dedicado más al cuidado y a las relaciones.... Para mí lo importante no es tanto ocupar espacios o reivindicar un papel, sino trabajar de igual a igual, juntos. La realidad es que el mundo ha sido confiado por Dios al hombre y a la mujer.

¿Cómo está la economía de la Santa Sede?

Yo me he ocupado mucho de la economía de las instituciones religiosas. Está claro que estamos viviendo un momento histórico, y la Santa Sede también lo está viviendo, en que se pasa de un mundo culturalmente cristiano, con muchas donaciones y una cercanía a la Iglesia por sus cuestiones sociales y religiosas, y de caridad... Hoy el mundo está cambiando, y las finanzas se resienten. Es importante vivir los valores de la transparencia, rendir cuentas, decir qué se hace y para qué, para dar gloria a Dios, servir al prójimo, para la caridad, que es el principal objetivo de los cristianos.

Hablar de las finanzas vaticanas es hablar del cardenal Pell...

Mi trabajo compete al Estado vaticano, no a la Curia y la Santa Sede, es distinto. El Estado vaticano es el Vaticano, no es el mundo. Son dos cosas diferentes, aunque es evidente que hay caminos que recorremos conjuntamente. En nuestro caso, aunque la Curia y la Santa Sede han caminado por una senda de un prefecto oficial, nosotros continuaremos nuestro camino.

¿Qué es el Papa Francisco para usted?

El Papa Francisco es un profeta de este tiempo. Como todos los profetas, no siempre es comprendido. Es una persona que vive simplemente el Evangelio, lo vive verdaderamente, casi al pie de la letra, y esto, como le pasó a Jesús en su tiempo, puede fastidiar a algunos. Creo que la fuerza de los gestos, de las palabras, lo que hace el Papa Francisco... comprenderemos su importancia con el paso de los años.

Alessandra Smerilli, con el Papa Francisco

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