El “Testamento de Orfeo”

Hoy escribe Fernando Bermejo

Como ejemplo, no de literatura órfica, pero sí del uso que del orfismo se hizo en otras corrientes religiosas, tenemos el denominado “Testamento de Orfeo”. Éste es un poema en el que Orfeo anuncia a su hijo Museo que abjura del politeísmo y pasa a creer en la existencia de un solo Dios, instruyendo luego sobre ello a su vástago, según el modelo de la poesía didáctica. Las diversas versiones que se conservan parecen seguir un proceso de expansión a partir de una versión primitiva.

La combinación de elementos típicos de la tradición judía (v. gr. unicidad e invisibilidad de Dios) con otros tomados de la tradición órfica anterior está encaminada precisamente a lograr un aura de autenticidad. De hecho, el verso inicial (“Hablaré a quienes es lícito, ¡cerrad las puertas, profanos...!”) es tradicional en la poesía órfica.

Obviamente, el “Testamento de Orfeo” es un texto pseudoepigráfico. Ya Ch. A. Lobeck, en el primer tercio del s. XIX, argumentó su origen judío, algo que hoy en día es universalmente admitido. Surgido en el ámbito de judíos helenizados, el texto sería luego citado abundantemente por apologistas cristianos (de quienes proceden las citas conservadas).

En efecto, diversos autores cristianos, entre ellos Teófilo (Ad Autolycum), Pseudo-Justino (De monarchia...), Lactancio (Divinae Institutiones), Cirilo de Alejandría (Contra Iulianum) o Eusebio (Praeparatio Evangelica) echaron mano del texto con el objeto de utilizarlo como un arma anti-pagana, arguyendo que el mismísimo Orfeo habría abjurado del politeísmo para abrazar la fe monoteísta.

Así, por ejemplo, Clemente de Alejandría dice en el Protréptico: “El tracio intérprete de misterios, y también poeta, Orfeo, hijo de Eagro, después de su exposición de los ritos orgiásticos y su discurso sagrado sobre los ídolos, entona la palinodia de la verdad, y, aunque tarde, canta un discurso realmente sacro [...] Así, con el tiempo, Orfeo comprendió que había errado”.

Para análisis detenidos del texto y sus testimonios, puede verse en castellano, v. gr.: A. Bernabé, Hieros Logos. Poesía órfica sobre los dioses, el alma y el más allá, Akal, Madrid, 2003; M. Herrero Jáuregui, Tradición órfica y cristianismo antiguo, Trotta, Madrid, 2007.

Saludos cordiales de Fernando Bermejo
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