Hoy escribe Antonio Piñero



Todavía me quedan en mi lista de libros por reseñar unos quince…, formando un montoncito que espera pacientemente su turno, cuando he aquí que me han llegado a casa tres más. Como el año sólo tiene 52 semanas (si no me equivoco), el asunto parece que se eterniza. Así que voy a hacer como la mayoría de las revistas, a saber una breve sección de libros “recibidos”: anunciar su existencia –y su ficha- y luego reseñarlos cuando sea posible, por orden de llegada.

Los tres recién llegados presumen ser muy interesantes.

El primero, de la Editorial Herder es la Correspondencia 1925-1975 entre Rudolf Bultmann y Martin Heidegger, dos gigantes del pensamiento del siglo XX, editada por Andreas Grossman y Christoff Landmesser con prólogo, nada menos de Eberhard Jüngel, y en traducción de Raúl Gabás.

Este libro publica 130 cartas (o tarjetas postales y tarjetones de ambos genios (47 documentos de Bultmann y 73 de Heidegger), por orden cronológico. Tiene además un apéndice muy rico con textos de ese último sobre Lutero y de Bultmann sobre Heidegger (artículos de diccionario, u otros), más una reflexión de Bultmann sobre “El camino del pensamiento de M. Heidegger). En total, con diversos índices (bib liográfico, onomástico y temático) 398 páginas.

El segundo de Klaus Berger (creo que conocido por –al menos algunos- de los lectores porque publicó en Sal Terrae, en 2009, su libro “Jesús”) cuyo título es Los primeros cristianos, traducido por Marciano Villanueva y publicado en la misma Editorial en 2011.

Este libro es una continuación de “Jesús” e intenta ser una historia de la iglesia primitiva, de los inmediatos seguidores del Nazareno, procurando contestar a las preguntas capitales de cómo han de explicarse las diferencias, si como rupturas o pregresos, entre la ideología y práctica religiosas de Jesús y el de sus seguidores.

Consecuentemente los temas son interesantes en extremo: “Puentes entre el tiempo de Jesús y los años fundacionales”; de “Rabbí” fracasado a redentor del mundo; la evolución en la continuidad; relaciones entre el pensamiento y vida de Jesús y la iglesia y el ministerio apostólico; el desarrollo del cristianismo hasta convertirse en una religión mundial; la formación del canon del Nuevo Testamento y el tema candente de “perseguidos y perseguidores”.

El tercero es Gonzalo Puente Ojea, autor idolatrado por muchos y no menos odiado por otros. Su último libro, que me llegó hace un par de semanas, lleva por título “La cruz y la corona. Las dos hipotecas de la historia de España” trata en su mayor parte de temas contemporáneos, como el concepto de laicismo y la aconfesionalidad del estado, junto con la perspectiva de la legitimación o no de la monarquía en el hoy de España. Pero tiene un amplísimo “prólogo didáctico” que afecta directamente a las cuestiones históricas de Jesús y el cristianismo primitivo que tratamos en este Blog.

Así Gonzalo Puente trata, como fundamentos del poder de corte totalitario de la Iglesia, y de la unión de religión política, los siguientes temas: la suplantación del mesías davídico de la historia (el Jesús histórico) por el Cristo paulino y luego de la fe de la Gran Iglesia; la asunción del evangelio paulino por los Evangelios sinópticos y el de Juan; la fundamentación teológica del poder totalitario de la Iglesia, y la vinculación de Iglesia y del estado en la ideología monárquica.

Como ven, hay cuestiones interesantes, que procuraremos debatir cuando le llegue el turno.

Por último, no sé si será interesante enunciar al menos la lista de los libros que me han llegado y que esperan reseña.

Saludos cordiales de Antonio Piñero.
Universidad Complutense de Madrid
www.antoniopinero.com