El significado del número 666 en el Apocalipsis. “Compartir. Preguntas y respuestas” (245)




Escribe Antonio Piñero


Pregunta:


Querría hacerle otra pregunta que he descubierto, que me parece muy interesante a ver si usted me lo puede aclarar se ha encontrado un papiro del apocalipsis que se llama papiro 115,que data del siglo II,III después de Cristo, que revela que el numero de la bestia en apocalipsis 13:18 no es el 666, sino el 616. es verdad?, es falso? existe este papiro con esa revelación? o es un engaño? el numero en griego es XIC,QUE SUMANDO LOS VALORES DE LAS LETRAS SALE 616,Y no 666. GRACIAS


Respuesta:

El número se ha interpretado de diversas maneras. La solución más probable sostiene que es este un caso de gematría: al sumar las cantidades que se expresan por las letras diversas del alfabeto, se logra un nombre o la designación de un hecho de importante significado (por ejemplo, tres veces las 14 [es la suma de las consonantes hebreas de David] generaciones de Mt 1).

En este caso la crítica está de acuerdo en que el vidente piensa en el valor de las letras hebreas que corresponden a la transcripción a esta lengua del nombre de Nerón y su título de emperador. En hebreo sería (transcrito sin vocales, como es usual¸ pero la vocal /o/ larga se transcribe con la consonante wau): Nrōn Qsr, lo que daría: nun: 50 + resh: 200 + waw: 6 + nun: 50 + qof: 100 + samekh: 60 + resh: 200 = 666. Esta es la transliteración griega pero escrita con letras hebreas: el nombre de Nerón acaba en /n/ en nominativo.

Pero si se piensa en la transliteración latina (en la que el nombre de Nerón acaba en /o/ larga en el nominativo) y se pasa también a letras hebreas, daría Nrō Qsr, cuyo equivalente en letras hebreas sería nun: 50 + resh: 200 + waw: 6 + qof: 100 + samekh: 60 + resh: 200 = 616, que es la variante de algunos manuscritos muy importantes, como el P. 115 y el denominado C = Codex Ephraemi rescriptus (un palimpsesto).


Pregunta:

Mi consulta es sobre las siguientes prácticas: el beso de Judas y el recostamiento del discípulo amado en Juan 13:23-25: ¿qué tan común era dar besos de traición en tiempos antiguos (y agrego a esto: ¿realmente el beso fue en la mejilla o fue en la mano?) y ¿qué conductas se permitían entre maestros y discípulos?


Respuesta:

Su pregunta es imposible de responder, ya que las fuentes escritas que tenemos a nuestra disposición no se plantean esas peguntas.

La conducta entre maestros y discípulos en el Israel de la época de Jesús era de máximo respeto. Pero, el Evangelio de Juan da a entender que Jesús trataba a sus discípulos con cierta familiaridad. Así (en un texto que no es histórico, pero que puede recoger algo del trato de Jesús) dice el Jesús del Cuarto Evangelio:


«Nadie tiene mayor amor que el que da su vida por sus amigos. Vosotros sois mis amigos, si hacéis lo que yo os mando. No os llamo ya siervos, porque el siervo no sabe lo que hace su amo; a vosotros os he llamado amigos, porque todo lo que he oído a mi Padre os lo he dado a conocer. No me habéis elegido vosotros a mí, sino que yo os he elegido a vosotros, y os he destinado para que vayáis y deis fruto, y que vuestro fruto permanezca; de modo que todo lo que pidáis al Padre en mi nombre os lo conceda. Lo que os mando es que os améis los unos a los otros» (Jn 15,13-17)


Estas palabras no provienen del Jesús histórico, sino de la teología del Evangelista que las pone en boca de aquel, pero quizás refleje un buen ambiente entre Maestro y discípulos.

Saludos cordiales de Antonio Piñero
Universidad Complutense de Madrid
www.ciudadanojesus.com
Volver arriba