¡Feliz domingo! Vamos a ir terminando con una obra que es de lo más conocida. Empezamos la serie de los famosísimos Conciertos de Brandeburgo y es posible que sean obras que casi nos sabemos de memoria debido a todo lo que suenan en muchos lugares.

Antes sigamos recorriendo la biografía de Johann Sebastian Bach (1685-1750), compositor alemán fallecido en Leipzig. Ya hemos visto cómo le encantaba tocar en el órgano Silbermann de San Pablo de la localidad. Allí tuvo oportunidad de introducir un nuevo género musical: el del concierto para órgano acompañado de instrumentos de cuerdas, quizá prototipos de los movimientos que incluiría como apertura de sus cantatas. En Leipzig Bach era toda una institución y mantenía buenas relaciones con otras instituciones de la ciudad, especialmente con Joachim Friedrich von Flemming, gobernador de Leipzig, quien había alojado a Bach en su mansión de Dresde en 1717, año del famoso duelo con Antoine Marchand.

Vamos a disfrutar del Concierto de Brandeburgo n.º 1 en fa mayor, BWV 1046. Fue compuesto alrededor de 1721 y dedicado a Christian Ludwig, Margrave de Brandeburgo, con la esperanza de que este lo contratase; no se molestó en responder a Bach. Este es quizá el más italiano de los conciertos excepto por el inusual uso de las trompas. El primer movimiento no tiene indicación de tempo y se inicia con una llamada de las trompas que parece que tocan casi de forma independiente. Le sigue un Adagio comenzado por el oboe y el violino piccolo formando un dueto. A continuación suena un Allegro con un material a solo del violín y termina con un Menuet - Trio, Menuet da capo: Polacca, Menuet da capo: Trio II, Menuet da capo. Este movimiento (este concierto es el único dividido en cuatro partes) nos hace olvidar la estructura de concerto grosso para caer en la cuenta de que casi la obra parece más una suite.

La partitura de la pieza puede descargarse aquí.

La interpretación es de Ars Lyrica Houston.