Bach, fantasía coral BWV 703
Su creador es Johann Sebastian Bach (1685-1750), compositor alemán nacido en Eisenach. A lo largo de la vida del maestro hubo varias personas que fueron importantes. Entre ella encontramos varios monarcas. Por ejemplo, Guillermo Ernesto, duque de Saxe-Weimar. Bach lo enfadó cuando este fue rechazado del puesto de músico de cámara del duque. El monarca respondió encarcelándolo (en Weimar) durante un mes. También el príncipe Leopoldo de Anhalt-Cöthen. Contrató a Bach en 1717 para ser su maestro de capilla. El príncipe tenía talento musical y le dio a Bach libertad para que compusiese lo que quisiera y dio a luz una gran cantidad de piezas profanas, como las suites orquestales, los conciertos de Brandeburgo, las suites para chelo y demás. Para Augusto III de Polonia compuso su kyrie y gloria que luego formarían parte de su gran misa, con objeto de que fuese contratado como compositor real, algo que consiguió tres años más tardes (1736). Finalmente está el poderoso Federico II de Prusia. Tocó un tema para que Bach compusiese alguna obra con él, y solo lo hizo con una sino que escribió una colección de ella que se llamaría «La ofrenda musical».
Hoy te traigo su Fantasía super «Jesu, meine Freude», BWV 713. Probablemente data de cuando Bach estaba en Weimar. Bach intenta describir aquí dos motivos: el nacimiento de Dios y su pasión. Por tanto, la obra está dividida en dos partes, la primera mostrando la escritura fugada de Bach más fina y la última un carácter más intenso, con un tempo más lento y un motivo más oscuro. El tema coral aparece en notas largas y pronto adquiere un carácter más contrapuntístico, mostrando unos detalles internos más intensos. Mientras una voz parece mostrar signos de alegría, las internas serenan el ambiente y lo hacen más tranquilo, más pasional, sin abandonar ese tono alegre y pacífico.
La partitura de la composición puedes descargarla aquí.
La interpretación es de Pilar Cabrera al órgano de la catedral de Astorga.