Bajo tu amparo nos acogemos

¡Feliz sábado! Hoy toca una pieza dedicada a la Virgen y la música la va a aportar uno de los nombras más importantes de la época barroca, cuya música poco a poco se va interpretando más. La música de calidad de va imponiendo poco a poco porque de forma natural tiene que ir aflorando. Es el caso de nuestro compositor, que es bastante conocido aunque para ti quizá no pueda parecerlo tanto. Alguna vez te lo he traído por aquí y siempre nos ha sorprendido su música, como hoy.

Nos visita Jan Dismas Zelenka (1679-1745), compositor checo nacido en Louňovice pod Blaníkem. Fue músico de la corte de Dresde y tanto Bach como Telemann admiraban su obra. Llegó a dar clases con Lotti y Fux cuando ya era un maestro consumado con una técnica fenomenal. Su instrumento era el contrabajo, que tocaba en la orquesta de la corte. También hizo sus pinitos dirigiendo ya que ayudaba a Heinichen se vez en cuando. En su tiempo era muy conocido por sus audacias armónicas y dinámicas y siempre estaba experimentando, llevando la armonía algún paso más allá de lo que establecían las normas barrocas. A menudo usaba el cromatismo de forma amplia, con cadencias que dejaba sin resolver y, como he dicho, sus exploraciones dinámicas lo relacionan directamente con el Romanticismo. Sin embargo, de todos estos elementos inusuales hizo Zelenka su modo de componer y no los veía como algo circunstancial y casi anecdótico. También usó profusamente los ritmos populares de la música checa, algo en lo que anticipó de forma clara a Haydn. Su música coral, sin embargo, es bastante conservadora, incluso en estilo antiguo al modo de Palestrina.

Una de ellas es este Sub tuum praesidium. Es un ejemplo perfecto de esto último que te he comentado sobre el compositor. En su obra, Zelenka se muestra de lo más conservador y parece que estamos escuchando a un compositor del Renacimiento en vez de a un barroco casi con el pie en el primer romanticismo. El maestro compone esta pieza mariana, también es cierto, con una técnica impecable, llena de sabiduría y mostrándonos un dominio de la polifonía y el contrapunto muy elevados.

La interpretación es de la Capella Piccola dirigida por Thomas Reuber.

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