Una bella sinfonía



Hay veces que de pronto escuchas una obra nueva que supone una bocanada amplia de aire fresco. Esto es lo que pasa con la obra de hoy, de un compositor bastante poco conocido que, en cualquier caso, debuta en este humilde blog. Todavía quedan por ahí miles de obras nuevas que merecen la pena ser disfrutadas y conocidas como Dios manda; como la de hoy.

Te presento hoy a Joachim Raff (1822-1882), maestro suizo nacido en Lachen. Gozó de una gran reputación durante su vida pero posteriormente no ha disfrutado de mucha fama. Fue animado a dedicarse a la música nada menos que por Mendelssohn y por Liszt. De este último fue asistente y orquestó algunas obras suyas tempranas. Fue un extraordinario profesor que procuró que esa fama no le ensombreciese su capacidad para componer buenas obras. En 1878 fue director y profesor del Conservatorio de Frankfurt. Allí tuvo la osadía, el buen ojo, y demostró un gran talento al contratar a Clara Schumann como profesora. No solo eso sino que lo hizo con otras mujeres, estableciendo en ese lugar una clase específica de mujeres compositoras. Era tan precoz en tantos talentos que, por ejemplo, fue elegido como traductor de latín cuando el nuncio papal visitó Suiza.

De Raff vamos a disfrutar hoy su Sinfonía nº 2 en Do Mayor, op. 140. Fue compuesta en 1866 y es uno de los ejemplos que demuestra que Raff era un reputado sinfonista. Digamos que Raff se situaba entre Mendelssohn y Brahms. La obra está muy bien compuesta, como comprobarás, está llena de bellas melodías. Para muchos críticos y conocedores, esta segunda sinfonía es una de sus mejores obras. Está dividida en cuatro movimientos: Allegro - Andante con moto - Allegro vivace - Andante maestoso, Allegro con spirito.

La partitura de la obra puedes descargarla aquí.

La interpretación es de la Orquesta Sinfónica de Bamberg dirigida por Hans Stadlmair.

Volver arriba