Cuando tres instrumentos se unen...
¡Feliz lunes! ¡Otra semana que empieza! ¡Disfrútala! ¿Qué crees tú que ocurre cuando tres instrumentos se unen? Pues que dan lugar a una música maravillosa, sobre todo si es del maestro que te traigo hoy, que ya nos ha acompañado varias veces. Su música es fresca, chispeante, llena de humor y con el único objetivo de hacernos entretener. ¡Y doy fe de que la obra de hoy lo consigue! ¿Quieres hacer la prueba y darme tu opinión?
Hoy te propongo disfrutar de su Sonata para trompa, trombón y trompeta. Fue compuesta en 1922 pero revisada en 1945. En la obra parece que predomina la trompeta pero la trompa también toma protagonismo. Precisamente destaca la trompeta en el primer movimiento, con su sonido brillante y esos marcados ritmos. En el movimiento central escuchamos una especia de canción de cuna con unas ligeras disonancias que producen un sonido de lo más bello. La obra termina con un intenso movimiento de danza, con una música ligera que nos recuerda a Rameau, conduciendo a un final de lo más emocionante y lleno de optimismo.
Sus movimientos son:
1. Allegro moderato
2. Andante
3. Rondeau
La partitura de la pieza puedes descargarla aquí.
La interpretación es de Alan Civil (trompa), John Iveson (trombón) y John Wilbraham (trompeta).