Corpus Christi, corpus sinodal
Hay un hambre profunda de felicidad, de justicia de belleza, de paz, de cariño, en todos los seres humanos.
Hay un hambre profunda de felicidad, de justicia de belleza, de paz, de cariño, en todos los seres humanos.
No estaría mal que algunos curas y algún que otro obispo fueran a su misa para aprender.