La Iglesia brasileña contra Proyecto de Ley que reduce la protección ambiental
“El proyecto tiene graves repercusiones, como la reducción de la evaluación previa de proyectos con potencial de causar daños irreversibles”
“La propia naturaleza se convierte, a veces, en un instrumento de intercambio, una mercancía que se negocia para obtener ganancias económicas o políticas”
“En un mundo en el que los más frágiles son los primeros en sufrir los efectos del cambio climático, cuidar de la creación es una cuestión de fe y de humanidad”
La Conferencia Nacional de los Obispos de Brasil (CNBB), con el apoyo de Con el apoyo de la Red Eclesial Panamazónica - REPAM-Brasil, el Consejo Indigenista Misionero – CIMI, Caritas Brasileira, Comisión Pastoral de la Tierra – CPT, Movimiento Laudato Si, Iniciativa Interreligiosa por los Bosques Tropicales - IRI Brasil, Asociación Nacional de Educación Católica de Brasil – ANEC, Consejo Nacional del Laicado de Brasil – CNLB y la conferencia Nacional de Religiosos de Brasil – CRB, han emitido una Nota sobre el Proyecto de Ley de Licencias Ambientales.
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El cuidado con la Casa Común es nuestra causa común
El texto comienza diciendo que “ el cuidado con la Casa Común es nuestra causa común”, e cita el libro del Apocalipsis: “No causéis daño a la tierra, ni al mar, ni a los árboles, hasta que hayamos marcado con el sello la frente de los siervos de nuestro Dios” (Ap 7,3). La nota responde a la aprobación del proyecto de ley 2.159/2021 por la Cámara de Diputados, el pasado 17 de julio, que ven como “un grave retroceso en la política medioambiental brasileña”.
Como se recoge en el escrito, “la nueva redacción, aún más débil que la aprobada en el Senado, desestructura principios consolidados de protección ambiental, debilita la concesión de licencias, fragiliza el control público y amenaza los territorios, las aguas, los bosques y la vida”. Junto con eso, la Iglesia brasileña afirma que “el texto legal crea dispositivos, como la ‘Licencia Ambiental Especial’ y la ‘Licencia por Adhesión y Compromiso’, que ponen en peligro el patrimonio ecológico nacional”.
Reducción del control ambiental
“El proyecto tiene graves repercusiones, como la reducción de la evaluación previa de proyectos con potencial de causar daños irreversibles. También debilita las normas en áreas sensibles como la Amazonia, la Mata Atlántica y el Cerrado. La propuesta ignora las evaluaciones técnicas, reduce la participación social y relativiza la responsabilidad estatal, favoreciendo los intereses económicos inmediatos en detrimento de la sostenibilidad y la justicia socioambiental”, denuncia el texto.
La nota recuerda que “en continuidad con el legado dejado por el Papa Francisco y en conmemoración de los 10 años de la publicación de la encíclica Laudato Si', el Papa León XIV promulgó el Decreto para la Misa pro custodia creationis (‘Misa para el cuidado de la creación’). La oración nos recuerda que debemos cuidar con amor la obra de la creación”.
La naturaleza como mercancía
La note recoge parte del mensaje para el 10.º Día Mundial de Oración por el Cuidado de la Creación, que se celebrará el próximo 1 de septiembre, donde el Papa nos advierte: “La propia naturaleza se convierte, a veces, en un instrumento de intercambio, una mercancía que se negocia para obtener ganancias económicas o políticas. En estas dinámicas, la creación se convierte en un campo de batalla por el control de los recursos vitales, como lo atestiguan las zonas agrícolas y los bosques que se han vuelto peligrosos a causa de las minas, la política de la «tierra quemada», los conflictos que estallan en torno a las fuentes de agua, la distribución desigual de las materias primas, que penaliza a las poblaciones más débiles y socava la propia estabilidad social». más débiles y minando la propia estabilidad social”.
En este espíritu, señala la nota, insiste el Papa León XIV: “En un mundo en el que los más frágiles son los primeros en sufrir los efectos del cambio climático, cuidar de la creación es una cuestión de fe y de humanidad”. Se trata, por tanto, según el episcopado brasileño y los organismos que apoyan el texto, “de una exigencia de justicia: proteger a los más vulnerables, garantizar los derechos territoriales y preservar los biomas brasileños, expresiones vivas de la diversidad de la creación. Que seamos, de hecho, guardianes de la obra de la creación sembrando justicia, contribuyendo a la paz y a la esperanza”.
Lógica del lucro sin límites
Finalmente, se advierte con fuerza que “ la Casa Común ya no soporta la lógica del lucro sin límites y la tecnocracia. Rechazamos vehementemente este proyecto y clamamos por una legislación ambiental que responda a la urgencia del tiempo presente con responsabilidad, diálogo, participación social y reverencia ante el misterio de la vida. Es necesario un desarrollo sostenible e inclusivo, una legislación unificada y que ayude a todos”.
Para ello, la nota, firmada por la presidencia del episcopado brasileño, hace “un llamamiento al pueblo de Dios, a todas las comunidades de fe y a las personas de buena voluntad para que se movilicen en oración, denuncia y acción”, pidiendo la intercesión de Nuestra Señora Aparecida “por nuestro país, nuestras autoridades y toda la creación”.