Preces Fieles (D. 22º TO A 2ª Lect. 03.09.2017): La existencia de Jesús es el “culto razonable”

Hoy nos ha dicho san Pablo que “presentar nuestros cuerpos como hostia viva, santa, agradable a Dios, es nuestro culto razonable”. “Nuestros cuerpos” es nuestra existencia, nuestra vida. Nuestro “culto razonable” es nuestra religión. Es decir, nuestra religión es nuestra vida conforme con el Evangelio de Jesús. Pidamos que nuestra vida sea como la de Jesús, diciendo: aquí estoy yo para hacer tu voluntad”.

Por la Iglesia:
- que cumpla la voluntad del Padre-Madre, expresada en la vida de Jesús;
- que sea fiel al Amor que “hace salir el sol y bajar la lluvia para todos” (Mt 5, 45).
Roguemos al Señor: “aquí estoy yo para hacer tu voluntad”.

Por las víctimas de los desastres naturales:
- que seamos solidarios con su desgracia, acudiendo en su ayuda;
- que acepten las limitaciones humanas y crean en el Amor del Creador.
Roguemos al Señor: “aquí estoy yo para hacer tu voluntad”.

Por el cese del terrorismo:
- que se acreciente la humanidad: el respeto a la vida, el cuidado de los más débiles;
- que se corrijan las causas del terrorismo: el hambre, el fanatismo, las dictaduras...
Roguemos al Señor: “aquí estoy yo para hacer tu voluntad”.

Por las religiones:
- que sean ofertas libres de sentido y orientación de la vida;
- que no se identifiquen con el poder civil y tengan vida propia al margen del Estado.
Roguemos al Señor: “aquí estoy yo para hacer tu voluntad”.

Por la libertad religiosa:
- que “la libertad religiosa sea protegida con tutela eficaz jurídica” (DH 15);
- que a nadie se le obligue ni se le impida su religión respetuosa con los derechos humanos.
Roguemos al Señor: “aquí estoy yo para hacer tu voluntad”.

Por esta celebración:
- que nos dé a sentir el amor de Dios y el sentido de nuestra vida;
- que nos “llame a estar cerca”, sobre todo de los más débiles.
Roguemos al Señor: “aquí estoy yo para hacer tu voluntad”.

Queremos, Señor, compartir tu vida. Aunque nos lleve a la cruz, como te llevó a ti. Queremos amar como tú: curar toda dolencia, promover la vida digna de personas, dar sentido y alegría a la vida. Que tu Espíritu nos llene y sepamos responderle por los siglos de los siglos.

Amén.

Rufo González
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