Preces de los Fieles (D. 18 TO 02-08-2015)
Hoy escuchamos a Jesús decir: “este es el trabajo que Dios quiere: que creáis en el que Él ha enviado”. El papa Francisco nos recuerda que “en el núcleo fundamental del Evangelio, lo que resplandece es la belleza del amor salvador de Dios, manifestado en Jesucristo muerto y resucitado” (EG 36). Pidamos vivir este amor diciendo: “¡Hemos encontrado al Mesías!” (Jn 1, 41).
Por las comunidades cristianas:
- que estén centradas en el Evangelio de Jesús, en vivir de su Espíritu;
- que revisen -miren una y otra vez- su vida mirando la vida de Jesús.
Roguemos al Señor: “¡Hemos encontrado al Mesías!” (Jn 1, 41).
Por quienes presiden las comunidades cristianas:
- que “conducidos en el Espíritu del Señor..., presbíteros y obispos eviten todo lo que pueda apartar de cualquier modo a los pobres, removiendo en sus cosas cualquier apariencia de vanidad ante los demás discípulos de Cristo. Dispongan su casa de tal modo que a nadie le parezca inaccesible y nadie, incluso el más humilde, tema frecuentarla” (PO 17).
Roguemos al Señor: “¡Hemos encontrado al Mesías!” (Jn 1, 41).
Por los gobernantes políticos:
- que el amor universal les libere del egoísmo partidista;
- que, libres de toda corrupción, trabajen por el bien de todos.
Roguemos al Señor: “¡Hemos encontrado al Mesías!” (Jn 1, 41).
Por la paz del mundo:
- que las religiones no sean nunca motivo de violencia;
- que se busquen noblemente y se remedien las causas de la injusticia.
Roguemos al Señor: “¡Hemos encontrado al Mesías!” (Jn 1, 41).
Por nuestros pueblos y ciudades:
- que vivamos los encuentros festivos en armonia y ayuda mutua;
- que disfrutemos de las vacaciones, descansando y animándonos.
Roguemos al Señor: “¡Hemos encontrado al Mesías!” (Jn 1, 41).
Por esta celebración:
- que nos alimente con “el pan de vida”, el Espíritu de Jesús;
- que nos dé a sentir el amor comprometido con los más débiles.
Roguemos al Señor: “¡Hemos encontrado al Mesías!” (Jn 1, 41).
Ven, Señor, sobre cada uno de nosotros y sobre nuestras comunidades.
Aliméntanos con el verdadero pan del cielo, el Espíritu que vivifica el pan y el vino,
y nos lo hacen tu cuerpo y tu sangre.
“Danos siempre de ese pan”, por los siglos de los siglos.
Amén.
Rufo González
Por las comunidades cristianas:
- que estén centradas en el Evangelio de Jesús, en vivir de su Espíritu;
- que revisen -miren una y otra vez- su vida mirando la vida de Jesús.
Roguemos al Señor: “¡Hemos encontrado al Mesías!” (Jn 1, 41).
Por quienes presiden las comunidades cristianas:
- que “conducidos en el Espíritu del Señor..., presbíteros y obispos eviten todo lo que pueda apartar de cualquier modo a los pobres, removiendo en sus cosas cualquier apariencia de vanidad ante los demás discípulos de Cristo. Dispongan su casa de tal modo que a nadie le parezca inaccesible y nadie, incluso el más humilde, tema frecuentarla” (PO 17).
Roguemos al Señor: “¡Hemos encontrado al Mesías!” (Jn 1, 41).
Por los gobernantes políticos:
- que el amor universal les libere del egoísmo partidista;
- que, libres de toda corrupción, trabajen por el bien de todos.
Roguemos al Señor: “¡Hemos encontrado al Mesías!” (Jn 1, 41).
Por la paz del mundo:
- que las religiones no sean nunca motivo de violencia;
- que se busquen noblemente y se remedien las causas de la injusticia.
Roguemos al Señor: “¡Hemos encontrado al Mesías!” (Jn 1, 41).
Por nuestros pueblos y ciudades:
- que vivamos los encuentros festivos en armonia y ayuda mutua;
- que disfrutemos de las vacaciones, descansando y animándonos.
Roguemos al Señor: “¡Hemos encontrado al Mesías!” (Jn 1, 41).
Por esta celebración:
- que nos alimente con “el pan de vida”, el Espíritu de Jesús;
- que nos dé a sentir el amor comprometido con los más débiles.
Roguemos al Señor: “¡Hemos encontrado al Mesías!” (Jn 1, 41).
Ven, Señor, sobre cada uno de nosotros y sobre nuestras comunidades.
Aliméntanos con el verdadero pan del cielo, el Espíritu que vivifica el pan y el vino,
y nos lo hacen tu cuerpo y tu sangre.
“Danos siempre de ese pan”, por los siglos de los siglos.
Amén.
Rufo González
