Gente bien informada me ha dicho que Laporta tiene todo interés por hacerse un hueco en la política y ser aforado no sólo por prestar un servicio al independentismo. “¿Qué otras razones puede tener una persona famosa y rica como él a no ser las de prestar un servicio desinteresado a la nación catalana?”, pregunté. Mis informantes se encogieron de hombros y me miraron a los ojos. Su lenguaje corporal no me permite hacer ninguna interpretación de los secretos que guarda el saliente presidente del Barça.