A continuación os daré dos o tres ejemplos de felicitaciones (de entre los cientos) que he recibido
1. ¿Por que ocultar el sentido cristiano, aunque uno no sea creyente, de la navidad?. Hace muchos años dejé de mandar felicitaciones con motivos cristianos, ahora he vuelto como protesta de la moda actual de olvidar y ocultar nuestras raíces para no molestar a los que vienen voluntariamente a nuestra tierra y donde espero se encuentren como en la suya. Mis raíces son cristianas y ni tengo porque sentirlo, ni tengo por que ocultarlo. Lo lamentable es que hasta hace poco tampoco tenía que decirlo. Por eso creo que debemos empezar a señalarlo, aunque actualmente no sea “políticamente correcto”, y desear Felices Navidades como antes, como siempre, y por eso HE CREIDO NECESARIO, LANZAR ESTE GRITO CONTRA EL RASTRILLO IGUALATORIO TALATIL.