Un par de buenas voluntades

Baltar hijo, presidente de la Diputación de Orense, puesto heredado de su padre, se opone a la creación de una comisión para investigar si hubo o no contratos concedidos a dedo por su padre cuando éste era presidente de la misma institución. Creo que nadie debe de poner el grito en el cielo ni escandalizarse porque, al fin y al cabo, una comisión de investigación compuesta por políticos pata investigar apolíticos no sirve para nada, “lobo no tira bocado a lobo”, máxime cuando el investigado hace o parte del partido con mayoría absoluta en dicha institución. Curras, el alcalde de Santiago dice que tiene la conciencia tranquila y que siempre actuó con buena intención. La política no es una cuestión ni de conciencia tranquila ni de buenas intenciones sino de hechos consumados, de buenas y malas obras. La conciencia es cosa suya y de buenas intenciones está lleno el infierno.
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