El cardenal de Madrid inaugura las IV Conversaciones PPC Osoro: “Dios hizo la tierra para todos los hombres, pero nosotros ponemos muros, fronteras, hacemos descartes”

“No olvidéis la hospitalidad”. El llamado de la carta de los Hebreos está marcando las IV Conversaciones PPC, que organizadas por la editorial y el Instituto Superior de Pastoral se están celebrando en Madrid y que han sido inauguradas por el cardenal de Madrid, Carlos Osoro, con un duro llamamiento a la acogida. “Dios hizo la tierra para todos los hombres, pero nosotros ponemos muros, fronteras, hacemos descartes”, subrayó Osoro.

Para el purpurado, esa actitud “nada tiene que ver con lo que tenemos que vivir”, porque “lo nuestro no es poner muros, hacer apartes, lo nuestro es hacer posible que este mundo sea una gran familia, la gran familia de los hijos de Dios”.

No es utopía, se puede hacer

“No es utopía, se puede hacer. Los discípulos de Cristo tenemos que tener una capacidad especial para ser creativos en estos momentos de la historia”, clamó el cardenal de Madrid, quien lamentó cómo un tema “tan importante para todos los pueblos”, no lo es “para esa Europa que se cierra, que además de ser vieja (por historia y por los que estamos en ella), no quiere hacerse joven, y no busca salida que sean creativas y que son válidas”.

Por su parte, Pedro Miguel García Fraile, director general de PPC, puso en el horizonte las conversaciones de hoy. “Si hay un tema importante para el pontificado actual, es éste”. Ahora se cumplen seis años de la primera visita, fuera de los muros de Roma, del Papa. “Fue a Lampedusa, cuando todavía no se había producido la tragedia del 3 de octubre de 2013, donde perecieron más de 300 personas. Su mensaje fue desgarrador, con la palabra 'Vergüenza'”, que todos recordamos.

Sigue la globalización de la indiferencia

A los seis años de aquella tragedia, subrayó Pedro Miguel, “el Papa ha invitado a 50 de los supervivientes de aquel día”. Sus palabras de entonces “resuenan hoy, con toda su fuerza. Todos estamos desorientados, no estamos atentos al mundo en que vivimos, no protegemos lo que Dios ha creado para nosotros, y no somos capaces de cuidarnos los unos a los otros”, recordó Pedro Miguel. Es la “globalización de la indiferencia”.

Antonio Ávila, director del Instituto Superior de Pastoral, reivindicó el organismo como “un centro teológico serio”. “La pastoral no es decir 'bobaditas', sino dar una formación seria y comprometida, donde no jugamos con las palabras como un malabarista”.

Al servicio de la Iglesia y la conversión

“Intentamos estar al servicio de la Iglesia, y de la conversión pastoral, hacer teología desde una comunidad cristiana”, recalcó Ávila. “Tenemos que estar al servicio de los excluidos, de los descartados, todos los que necesitan e nuestra palabra de aliento y reconfortadora”.

El responsable del ISP quiso concluir dando “las gracias a los emigrantes, que son una riqueza para nosotros”. “No sólo debemos plantear qué debemos hacer, eso es paternalista, sino qué tenemos que aprender de ellos. Están poniendo en crítica nuestra manera de vivir”.

Finalmente, Luis Fernando Crespo, presidente de PPC-SM, llamó a dar “un aldabonazo en nuestras conciencias”, porque “acoger es encontrarse, es relacionarse, es dar singularidad a las personas desde su propia diversidad, que muchas veces cuestiona nuestros propios posicionamientos. Es construir redes de participación y colaboración que haga de nuestra sociedad algo distinto”.