Y lo dejó muy claro ayer el presidente de
BBK, Mario Fernández. Nada de Iglesia en Cajasur. Ni presencia en el consejo -como exigía el Cabildo como entidad fundadora-, ni en la Obra Social. "
La Iglesia no estará presente", apuntó tras su encuentro con el presidente de la Junta de Andalucía. "
No me incluyo en el grupo de creyentes", aseguró Fernández, por si no había quedado claro. Así, la Iglesia, como anunciamos, no tendrá representación
en ningún órgano de gobierno de la entidad y tampoco estará presente en la
nueva fundación con sede en Córdoba que gestionará la obra social y cultural. Y tampoco se librará la caja de un
sensible recorte laboral que, eso sí, aseguró serán pactados con los sindicatos. Y el obispo, y la diócesis, que mostraron respeto y cautela ante la decisión, callados. Ni honra, ni barcos, como dicen otros. Que también se esconden en el anonimato. En fin, estos son los resultados que merece la mala gestión. La pena es que quienes van a sufrir tienen nombre, apellidos.... y no llevan mitra ni clergyman.
baronrampante@hotmail.es