Marx y la Biblia



El Dios de la Biblia. Conocer a Yahvé
(Cont., viene del día 27)

No nos detengamos más en Oseas. Aunque ya vimos que su testimonio, de principios del siglo VIII, vale para toda la tradición bíblica anterior, importa mucho constatar que no sólo Oseas y Jeremías dan por archisabida la identidad entre conocer a Dios y hacerles justicia a los desamparados.

En Isaías la encontramos igualmente evidente: Is 11, 1-9. Como observa bien Botterweck en la expresión "conocimiento y temor de Yahvé" (Is 11, 2 d) el genitivo objetivo afecta tanto a conocimiento como a temor; en realidad aquí conocimiento y temor son todo uno. Es el conocimiento de Yahvé el que hará que el Mesías "con justicia defienda la causa de los pobres, con rectitud el pleito de los humildes. Herirá al violento con la vara de su boca, y al injusto con el aliento de sus labios. La justicia será cinturón de sus lomos, y la entereza ceñidor de sus caderas" (Is 11, 4-5).

Que entre las dotes del Mesías (v.2) es precisamente el conocimiento de Yahvé la decisiva a los ojos de Isaías, lo demuestra la recapitulación que hace "inclusión": "No harán daño ni violencia por todo mi monte santo, porque estará la tierra llena de conocimiento de Yahvé como las aguas colman el mar" (v.9).

Por lo demás, ya este solo versículo basta para documentar la sobreentendida identidad entre conocimiento de Yahvé y realización de la justicia. Conviene tener presente que la paz de que los v.6-8 hablan, es, según Isaías, producto de la justicia: "La obra de la justicia será la paz; y la acción del derecho calma y tranquilidad perpetuas; mi pueblo habitará en dehesas de paz, en moradas tranquilas, en mansiones sosegadas" (Is 32, 17-18).

La cita del versículo Is 11, 9 en Hab 2, 14 es muy elocuente, pues por la reacción de los exégetas se hace ostensible que "conocimiento de Yahvé" no puede absolutamente entenderse si no se cae en la cuenta de que es estricto sinónimo de realización de la justicia. Lo común es declarar glosa el versículo Hab 2, 14, o por lo menos la palabra "conocimiento"...

La estructura antitética nos obliga a considerar Hab 2, 14 estrictamente como desbordamiento del sentido de justicia en los pueblos que han sido oprimidos y esclavizados por el emperador babilónico: desbordamiento de justicia que pondrá fin al dominio babilónico (v.13)...

En el término "conocimiento de Yahvé" Habacuc supone que sus destinatarios ven en ese versículo como abundancia de sentido de justicia, pues reza así: "Ya no harán daño ni violencia... porque la tierra se llenará de conocimiento de Yahvé como las aguas colman el mar". Esa es la idea, "ya no harán daño ni violencia", que induce a Habacuc a citar; pero ese desbordamiento de justicia se llama conocer a Yahvé.

Tal identidad aparece una vez más en cap 1 de Isaías. Consta el cap. de tres grandes requisitorias paralelas: describen el pecado de Judá y Jerusalen en diversas claves y figuras, y correspondientemente el gran castigo : v.2-9; 10-20; 21-28.

La tercera tiene como tema: "Cómo se ha vuelto ramera la ciudad fiel; antes colmada de justicia, morada del derecho (v.1)...No defienden al huérfano, la queja de la viuda no llega hasta ellos (v.3)...Sión será rescatada a base de justicia, los repatriados a base de derecho (v.27)...los que abandonan a Yahvé perecerán (v.28)".

La segunda tiene como tema vuestras solemnidades y fietas las detesto (v.14)...Buscad la justicia, ayudad al oprimido, hacedle justicia al huérfano, defended la causa de la viuda (v. 17)...Si rehusáis y resisitís, la espada os devorará (v.20)".

La primera requisitoria describe el castigo más por extenso (v. 5-9), pero el pecado que las otras dos describen expresamente en términos de injusticia, la primera la formula así: "Conoce el buey a su amo, el asno el pesebre de su dueño; Israel no conoce, mi pueblo no entiende" (v.3).

El paralelismo de las tres requisitorias parece conclusivo: lo que la segunda y la tercera llaman falta de justicia y de derecho, la primera lo llma falta de conocimiento de Yahvé. Que en negativo, es exastamente la misma terminología de Is 11, 2.9.

Ver:José Porfirio Miranda, Marx y la Biblia.
Crítica a la filosofía de la opresión
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