El Juzgado de Instrucción número 5 de Valladolid se ha hecho cargo, provisionalmente, de la denuncia contra el párroco de Zatarán, Ó. F. L., a quien un padre de una joven de 14 años, residente en Alicante, denunció por los mensajes que dirigió a la menor a través de Internet a finales del pasado mes de junio. Lo cuenta El Norte de Castilla.
Este órgano jurisdiccional se hecho cargo al estar de guardia esta semana, y a la espera de que el decanato de los jueces fije por reparto quién asumirá la investigación, que ha sido encomendada a la Guardia Civil. Los agentes han remitido la transcripción de los mensajes a través de la red de Tuenti, en los que el sacerdote, de 30 años, decía a la joven que estaba «tremenda» y que «era un bellezón», entre otros.
Por otra parte, el cardenal arzobispo de Madrid y presidente de la Conferencia Episcopal, monseñor Antonio María Rouco Varela, dijo ayer en Ávila no tener «la menor idea» sobre el párroco de Zaratán que ha sido apartado del ejercicio eclesiástico al conocerse que mantuvo conversaciones subidas de tono con una menor alicantina, informa Europa Press.
«No tengo la menor idea sobre ese asunto», afirmó ante las preguntas de los periodistas sobre lo ocurrido con el párroco, Ó. F., momentos antes de pronunciar una conferencia en el marco del curso 'Dios en la sociedad postsecular' que organiza la Facultad de Teología San Dámaso, la Universidad San Pablo CEU y la Universidad Católica de Ávila.
Días atrás, el cardenal arzobispo emérito de Sevilla, Carlos Amigo, calificó la situación denunciada de «anécdota».
