En España cada vez hay menos católicos y, los que lo son, no suelen ir a misa. Estos son los principales datos que se desprenden de la última encuesta del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS). Los principales datos indican que el 72,7% de los ciudadanos se declara católico, doce puntos menos que hace una década.
En 2000, los que decían ser católicos ascendían al 84,7%, lo que supone que un 12% de la población -casi cinco millones de personas- ya no es católica.
Uno de cada cuatro, además, se declara creyente o ateo, un porcentaje que se ha doblado en la última década. Un 2,1 dicen ser practicantes de otra religión.
En cuanto a la práctica religiosa, cabe decir que ha descendido notablemente. Así, más del 56% de los ciudadanos que afirman ser creyentes no va casi nunca a misa. También han descendido los practicantes que van todos los domingos y festivos. Solo lo hace el 13% de los creyentes (el 8 % de la población total) frente al 21% de hace una decada.
(Rd/Agencias)
