No me he olvidado de Guadix.
José Rico Pavés nació en Granada (9.10.1966). Tiene por tanto 42 años. Y ese podría ser el inconveniente. Formado en el seminario toledano en los días áureos de Don Marcelo, es doctor en Teología por la Gregoriana y ocupa la dirección del Secretariado de la Comisión Episcopal para la Doctrina de la Fe. Hijo de un catedrático de Medicina es un ejemplo más de muchos sacerdotes de hoy que nada tienen que ver con los desertores del arado de antaño. Quieren ser sacerdotes porque se han enamorado de Cristo y dejándolo todo, le siguen. El mundo les ofrecía un amplio panorama de pòsibilidades. Tiene su mérito el rechazarlas.
Si el cardenal Re me lo confirmara os lo diría encantado. Hoy sólo me he hecho eco de uno de los muchísimos rumores que circulan por Madrid.
P.D.: Seguramente no he estado afortunado con lo de desertores del arado. Puntualizo. Antes muchos elegían la carrera sacerdotal ante un duro porvenir en el campo que no se sabía si daba más trabajo que hambre o más hambre que trabajo. Y siempre mucho y mucha. De esos, algunos fueron santos sacerdotes, ciertamente el cura de Ars, muchos, buenos sacerdotes y otros lamentables sacerdotes. He querido decir que hoy nadie se hace cura, en España, para huir del hambre. Y muchos tendrían más ganancia, según el mundo, quedándose en él que haciéndose curas. Está claro que buscan otras ganancias. Esas a las que no daña la polilla. Si he ofendido a alguno, le pido perdón. Cuando quiero ofender creo que se me nota mucho. Si esta vez ha ocurrido ha sido contra mi voluntad.