Un lector ha dicho que sonaba un toledano para Guadix. Y otro añadió que de Toledo sólo los mazapanes. Lo que voy a decir no es una confidencia del cardenal Re. Que me temo ni sabe que existe esa diócesis semiapostólica. Son sólo conjeturas mías.
Si fuera un toledano pienso que el mejor situado de salida es el vicario general del cardenal Cañizares, Juan Miguel Ferrer. Este sacerdote nacido en Madrid el 29 de mayo de 1961, formado en el Seminario toledano y Doctor en Liturgia por Roma, lleva algún tiempo sonando en las quinielas episcopales. Supongo que el ya Prefecto de la Congregación para el Culto Divino habrá recomendado a quien fue su mano derecha en la archidiócesis primada.
Si fuera el nuevo obispo de Guadix que se tranquilicen los fieles de esa antiquísima diócesis pues no tiene nada que ver con Vayacruz. Si recurrimos a símiles del reino animal, el que se va sería el obispo lapa mientras que Ferrer sería el obispo hormiga. Trabajador, activísimo, sabiendo lo que quiere... Creo que les habría tocado un premio gordo en la lotería episcopal. Ojalá el cardenal Re me confirme lo que hoy por hoy es sólo una suposición por mi parte.