Presentado "Por una cultura de Paz. Resolución de conflictos y mediación" (PPC) José Carlos Rodríguez Soto: "No hay ninguna guerra buena, ni una paz que sea mala"
(Jesús Bastante).- África llora. Sigue llorando por las docenas de guerras que, todavía hoy, asolan el continente. Malí y República Centroafricana son los últimos ejemplos de conflictos más o menos olvidados. Y, sin embargo, "hay ahora menos guerras que hace diez años", subraya José Carlos Rodríguez Soto, que ayer presentó en la sede de FunSur su último libro, "Por una cultura de Paz. Resolución de conflictos y mediación" (PPC).
Un libro que relata la experiencia de Soto como mediador en la resolución de conflictos en el continente. Algunos eternos, como el del Sáhara, otros resueltos de forma ejemplar, como los de Mozambique, Sudáfrica o, en menor medida, Sudán. Y en los que la figura del mediador es esencial, pero también la voluntad de las partes. "El 90% de la resolución de conflictos está basada en la confianza. Pero eso puede llevar tiempo", apunta Soto.
Asombrosa capacidad de perdón
José Carlos sostiene una idea fundamental para su trabajo, y que funciona sobre el terreno: "Si no conseguimos un acuerdo de paz, ¿cuál es la alternativa? ¿Continuar con el derramamiento de sangre? No hay ninguna guerra buena, ni un apaz que sea mala". No vale todo para conseguir la paz, pero sí aprender que todos tienen que dar su brazo a torcer y buscar el camino para la reconciliación. Y en África, por paradójico que pueda parecer, "es asombrosa la capacidad de perdón de esta gente".
Un perdón que no ha de estar reñido con la justicia, especialmente en casos de genocidio y crímenes contra la humanidad, donde actúa la Corte Penal Internacional. Algunos dictadores, como Robert Mugabe, siguen impunes gracias al apoyo de gobiernos de la zona, aunque, como señala Rodríguez Soto, "los organismos africanos están mejor preparados que hace 20 años".
Malí y Centroáfrica
José Carlos acaba de regresar de República Centroafricana, donde "las cosas están muy mal", tras el golpe de Estado de Seleka y la autoproclamación de un nuevo jefe de Gobierno. Sin embargo, el autor del libro es optimista, porque "el principio de la solución está en que la comunidad internacional diga que esto no es aceptable. Y, de momento, la Unión Africana ha suspendido al país de pertenencia y no ha reconocido al nuevo gobierno".
Esto puede llevar, en unos meses, a la creación de un Gobierno de Transición que culmine en unas elecciones.
¿Deberían enviarse tropas a Centroáfrica como ha sucedido en Malí? Algo que pedía el obispo de Bangassou, Juan José Aguirre, y que Rodríguez Soto no comparte. "¿Enviar a 10.000 soldados a Malí? ¿Es Malí otra solución? Si se hubieran enviado al principio, tal vez hubiera servido, pero hacerlo ahora podría suponer una guerra cruenta, y sería peor el remedio que la enfermedad".
Joseph Kony
¿Es posible que los violentos consigan acabar trabajando por la paz? "No siempre. En muchas ocasiones, sucede. Pero en casos como el de Joseph Kony -líder del Ejército de Liberación del Señor-, esto no es posible. Kony, como Hitler o Stalin, ha nacido para hacer el mal". Soto estuvo cerca del criminal más buscado en la actualidad, "y nunca llegué a ilusionarme con que aceptara la paz".
¿Dónde está Kony? "Kony lleva un año en Darfur, protegido por el Gobierno de Sudán", desvela Soto, quien insiste en que "lo importante no sólo es encontrar a Kony, sino hallar y liberar a los centenares del secuestrados por el LRA".
Pese a todo, el experto continúa defendiendo que "el diálogo da buenas soluciones", y que también hay que contar con los recursos militares, "aunque sólo sea para acciones con tiros al aire que sirvan para que los secuestrados puedan huir".