"Confía en el Señor y haz el bien", lo leemos, lo rezamos en el salmo 36.
Confiar,
cuando las cosas nos salen bien, cuando disfrutamos de la luz, el sol, el calor o el frío, de la lluvia, de cuantos detalles recibo a lo largo de un día, pero, sobre todo;
cuando no salen tan bien, cuando tropiezo con contrariedades pequeñas o grandes, cuando tengo una pena, cuando sencillamente lo veo todo negro.
Confiar en las personas y hacer el bien.¡Son tantas las oportunidades! Ancianos que están solos, jóvenes a los que puedo escuchar, niños que necesitan, a lo mejor, alimentos pero también cariño. Y eso sin descuidar a los que están cerca, con los que convivo.
Confía en el Señor y haz el bien,
practica la lealtad, confía en el Señor y él te dará lo que pide tu corazón.
Texto: Sor María Josefa Cases.