Veteranos, Constantes, de Asistencia Ejemplar.

Mes a mes, y noche a noche. Así se ha ido tejiendo la historia del Turno 24 de la Adoración Nocturna de Vitoria, fundado y mantenido en la parroquia de Ntra. Sra. Madre de los Desamparados. La noche del 14 al 15 de mayo, y coincidiendo con la festividad de la Virgen de los Desamparados, titular del turno y la parroquia, se celebrará una vigilia mariana de oración y Adoración Nocturna para dar gracias por estas Bodas de Oro recién cumplidas.
Historia.


La noche del 12 al 13 de febrero de 1966, 44 hombres, presididos por D. Javier Illanas, párroco de los Desamparados, celebraron la primera vigilia del turno. Se hacía realidad una idea que tanto el párroco como algunos feligreses venían persiguiendo desde hacía meses. En la constitución del turno José Ramón Areilza se convirtió en el primer jefe de turno y Ángel Armentia en su secretario. Desde aquellos primeros 44 hombres, en torno a unas 200 personas han formado parte de este turno en algún momento de sus 50 años. Sigue siendo el turno más numeroso de la diócesis con 30 miembros, pero en los archivos se encuentra el dato de alcanzar la cifra de 112 adoradores inscritos en el año 1970.


Si bien, casi desde el principio, algunas mujeres participaban de las vigilias, no sería hasta el año 1978 cuando se integrasen oficialmente en el turno, siendo un paso pionero en la Adoración Nocturna Española, que si bien sigue manteniendo dos ramas, la masculina, a finales de los años 70 y con Vitoria como una de sus sedes pioneras, fueron aceptando con normalidad los turnos mixtos.

Otro de los hitos del turno 24 a lo largo de su historia es el haber sido la cuna del movimiento juvenil de la Adoración Nocturna diocesana. El grupo de jóvenes que, arropados por el Consejo Diocesano, empezaron a tener sus Vigilias con otro estilo y otro esquema, fue protagonista también de la puesta en marcha del movimiento juvenil de esta Obra de la Iglesia a nivel nacional y fue clave para la creación de turnos juveniles en otras diócesis como Santander o Palencia. El movimiento juvenil aportó a la Adoración Nocturna Española un soplo de esperanza que puede sintetizarse en el lema que acabó extendiéndose para toda la ANE: Adoradores de Noche y Testigos de Día.
La trayectoria del turno 24 de la Adoración Nocturna en Vitoria es similar a la del resto de turnos que, tanto en la ciudad como en algunas localidades de la diócesis, se mantienen en esa pequeña fidelidad mensual de Adoración Eucarística. Algo que, hoy más que nunca, sigue siendo un valor que algunos desean mantener.


Non solum sed etiam.


Cómo no recoger esta efeméride que socialmente está llamada a pasar desapercibida. Más cuando me siento coprotagonista de parte de esos 50 años de vida del turno 24. El que fundara mi padre junto con otros 44 hombres. Al que me sume tras su muerte para acompañar a mi madre que quiso ser el relevo de mi padre. Cómo no hablar de lo que he vivido y de lo que he participado en primera persona.

Para muchos la Adoración Nocturna suena a movimiento casposo. Nada nuevo, cuando yo la conocí ya sonaba a movimiento casposo. La Adoración Nocturna Española, la ANE, suena a Iglesia vinculada con ideas políticas, y ciertamente hay adoradores en España que funden su patriotismo con su pertenencia a la ANE. La ANE suena a liturgia preconciliar, y es cierto que mantiene un esquema de funcionamiento que, y a las pruebas me remito, le ha garantizado la fidelidad de sus miembros en más de cien años de historia.


Pero, después de casi 30 años de vinculación militante en la ANE, y hasta los casi 40, que se cumplirán en un par de años, de mi vinculación afectiva, creo poder afirmar con seguridad que por un lado una parte de lo que soy se lo debo también a la Adoración Nocturna y estoy orgulloso de ello; y por otra que lo que ha unido, une y unirá a los hombres y mujeres que pertenecen a esta asociación de fieles es, única y exclusivamente, el Amor a Cristo Eucaristía, la fascinación por un Dios que se hizo hombre y que se quedó con nosotros tras el misterio del Pan y el Vino. Un Pan que es mucho más que el cuerpo, que es la Persona de Cristo, y un Vino que es mucho más que la Sangre, es la Muerte y la Vida entregada por todos y cada uno de nosotros.
Los 50 años de fidelidad adoradora de una parroquia de Vitoria no serán noticia de portada, pero sí es noticia, porque en un mundo como el de hoy la constancia es una gran noticia. Felicidades hombres y mueres del Turno 24 y de otros turnos de la ANE que mantenéis vuestra cita mensual para rezar por las necesidades del mundo y de la Iglesia. Por haber alcanzado el título de Veteranos, Constantes, de Asistencia Ejemplar.

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