JUAN SIMARRO
Estamos en Adviento. Tened esperanza. El desierto florecerá. Aunque no voy a hablar estrictamente de esta época del calendario litúrgico, si voy a acordarme de los textos proféticos que se suelen recordar en esta época del año. Tiempo de expectación, de espera del Mesías: el desierto se alegrará y el yermo florecerá como la rosa. Las expectativas se han de cumplir. Dios cumple siempre sus promesas. El rosal lejano, al fin acabará dando la rosa esperada. Tenéis que correr para poder contemplar la flor del soberano linaje de David.