¿El obispo de Vic, amigo de xenófobos?
El pobre no escucha, porque antes de venir a Vic lo confesaron muy bien, y lleno de prejuicios como está, tiene miedo, y eso da pena.Sus visitas pastorales son todo un cuadro, idénticas y sin espacios para la libre expresión, a no ser que alguien quiera decirle algo y con inteligencia aproveche cuando se pone en el confesionario, corriendo el riesgo -real y ocurrido- de que se encuentre con la frase de "eso no toca en confesión".
El caso es que desde hace unos días circulan unas postales con su cara... Son anónimas y eso es impredonable. Eso nos hace daño a los que día a día intentamos trabajar por nuestra Iglesia diocesana. Pero prueba de que algo no anda bien, es que estos recursos se utilicen.
Desde Religión Digital, apelo a la solidaridad y a la oración de los lectores: Vivimos horas muy bajas; vemos cómo poco a poco lo poco que había se va hundiendo, y padecemos porque se quieren salvar situaciones apelando a estilos poco evangélicos o ya superados: Hace unos años la Conferencia episcopal advertía de la "importación de monjas indias y africanas" a los conventos; a Vic el Obispo, haciendo oído sordo e ignorando los problemas que trajo a la Diócesis esta importación, va a traer seminaristas rwandeses.
Insiste en abrir las escolanías para tener de nuevo seminarios menores y luego garantizar que haya curas.... Hace nombramientos en el BOBV que son revocados a las 24 Hs., y lo que es peor sólo se rodea de los que son de su cuerda.
Lo que más duele es su racismo respecto al mundo del Islam y su amistad profunda con el Sr. Josep Anglada, el líder xenófovo de Vic.
Condeno la Campaña de targetas anónimas que tanto daño hacen -sólo los cobardes se esconden en el anonimato- porque eso romperá por parte de Casanova cualquier puente de diálogo.
Pido nos apoyen con la oración y que nos dejen construir la Iglesia con ilusión y alegría
Cesar Josep Pujol