EL OBISPO SIEMPRE "TIRANDO DEL CARRO". ¿PERO DE ÉL, QUIÉN TIRA?

Para los Obispos.

EL OBISPO SIEMPRE "TIRANDO DEL CARRO". ¿PERO DE ÉL, QUIÉN TIRA?

baculo

Querido señor obispo de habla hispana: Me acerco a ti, como tú a la Virgen María, mientras Dios me dé vida. Pienso en lo íntimo de mi conciencia que así lo quiere Dios. Me arrimo como cireneo para ayudarte con mi oración, mi sacrificio, en este Cuerpo Místico de Cristo, porque sé que por tu cargo lo necesitarás mucho. Y no te preocupes en contestar a mis cartas, porque sé que tienes muchísimo trabajo y otros te necesitan. Pero deseo que te sepas respaldado por un amigo y por otras personas que tal vez ni conozcas.

Sé que rezas todas las mañanas. A esa hora, a muchos kilómetros de distancia también me encuentro yo junto al Señor y ofrezco mi oración por ti.

Te envidio porque puedes proclamar por todas partes el amor de Dios, la entrega de Jesucristo a nosotros. Es algo extraordinario esa palestra constante de evangelización que tienes al ser obispo. Es una baza que espero sepas explotar en todo momento para el bien de la Iglesia, para la extensión del Reino de Dios.

Sufro al no poder ir gritando por todas partes el amor de Dios. Sufro al ver un mundo que cada vez se aleja más de Dios, de la verdadera fe, de toda trascendencia. Sufro al no disponer de ningún prestigio testimonial como los santos. Me entrego a Dios en la oración, y se nota después en mi actuación. Debemos unirnos todos los seguidores de Cristo y poner cada uno el total de nuestra fuerza interior al servicio del Evangelio. Pido al Señor que le seas fiel.

¡Quién pudiera tener la santidad que da autoridad y testimonio a la voz! Eso pido al Señor por nosotros. Tú, como obispo aún la necesitas más, porque eres líder de primera fila. Yo estoy seguro de que cada vez la tendrás en mayor abundancia. Muchos pedimos por ti y lo has de notar. La oración asidua, atenta, hecha con sinceridad, aunque sea imperfecta, transforma y arrastra a las almas. Cuando oramos de verdad, no hablamos de memoria ni tratamos a la gente con convencionalismo. Sin darnos cuenta transmitimos Mensaje y amor sobrenatural.

Quisiera para nosotros esa valentía de los Apóstoles: con menos afanes "administrativos", sin convencionalismos que nos atan, sin tanto afán de reunión estéril y con más unión en el amor de Cristo.

Eres obispo. Muchas veces pienso cómo el obispo anima, santifica, ayuda a todos. ¿Y al obispo quién le ayuda? El siempre "tirando del carro", pero de él ¿quién tira? Sí, Jesús el Buen Pastor os ayuda de una manera especial. Pero quiero que no te encuentres solo porque muchos estamos detrás intentando hacer un poco de motor en este Cuerpo Místico. Yo quisiera que nunca te encontraras solo, aunque sí que ames la soledad. Recuerdo ahora a aquel profesor que nos decía: "Cada vez amo más la soledad".

 José María Lorenzo Amelibia

 Si quieres escribirme hazlo a: josemarilorenzo092@gmail.com          

Mi blog: https://www.religiondigital.org/secularizados-_mistica_y_obispos/      

 Puedes solicitar mi amistad en Facebook https://www.facebook.com/josemari.lorenzoamelibia.3                                          Mi cuenta en Twitter: @JosemariLorenz2

Volver arriba