Copiamos el presente testimonio, omitiendo los nombres propios que puedan identificar a los presuntamente culpables, según nuestra práctica habitual.

Amancio cuenta una historia casi surrealista. Se separó de su mujer en 1998, pero ella pidió la nulidad matrimonial a la semana. Él sospechaba que ella mantenía un romance con el cura del lugar, aunque ellos lo negaron y la autoridad eclesial le declaró «desequilibrado psíquico», por lo que la nulidad salió adelante.


Su sorpresa se produjo cuando su ex-mujer se casó con el cura -del que sospechaba- por lo civil, en 2006, mientras la autoridad eclesiástica... miraba para otro lado. Ahora, denuncia el proceso de nulidad de su matrimonio esperando una rectificación.

«El Tribunal Eclesiástico resolvió que yo tenía un problema de desequilibrio psíquico y que estaba celoso de un cura», cuenta Amancio en la entrevista concedida a infoCatólica. Años después de concederle la nulidad, el cura se casó por lo civil con su ex-mujer, a pesar de las denuncias y el escándalo que esto levantó entre los feligreses católicos.

Ahora, Amancio pide que al menos se disculpen ante el atropello que padeció. «No me mueven los celos, he aceptado la situación pero denuncio el corporativismo del clero. Tras doce años de la nulidad, aún no me han pedido disculpas», explica. «He pedido los autos de la nulidad pero dicen que ha transcurrido el plazo».

A Amancio tampoco le creyeron porque un testigo dijo que «era un inmaduro religioso por asistir a cultos religiosos evangélicos». Sin embargo, insiste en que se reconozca que tenía razón. «Ahora pediré al Tribunal de Rota que revise la nulidad».

De todo esto, Amancio sacó una conclusión. «Veo un corporativismo tremendo. Uno de los curas testigos me dijo que así ya tenía yo papeles para casarme con otra. Un abogado está ahora estudiando los trámites que podría iniciar. Pido ahora que se de marcha atrás en la nulidad, porque a mí me acusaron de desequilibrado», apunta el damnificado.

Finalmente, con el cura «casado» con su exmujer, él solo piensa que se pone en relieve la «doble moral» de la iglesia, que se ofende – sin prohibirlo - porque éste siga celebrando misas, pero apenas se preocupa por su caso, que a su juicio es mucho más grave. «Gracias a este cambalache montado por el mencionado tribunal eclesiástico ahora hay un cura oficialmente amancebado con una señora que en este momento es soltera mientras no se lleve a efecto la anulación de la nulidad», finaliza la entrevista.

Noticia tomada de 07/12/2010 (infoCatólica/ Protestante Digital.com)

Breve comentario

Aunque parece una novela, es algo real. Un escándalo más cometido dentro de la ley del celibato. ¿Hasta qué punto existe la fe en las personas culpables? ¿Hasta cuándo van a mantener una ley que nos está causando sorpresas tan duras y rocambolescas?