1.- El Cuerpo de Cristo, reclinado en un pesebre, recibió la adoración de los pastores. Después de unos días, no sabemos cuántos, en su misma casa, recibió la adoración de los Reyes Magos.

2.- Tú, Señor, estás en mí después de la comunión; en lugar más pobre que un establo, porque mi vida es una ruina de lo que debiera ser. .- Pero desde la ruindad de mi alma quiero adorarte, Jesús, quiero amarte, quiero difundir tu mensaje e ir por todas las partes proclamando tu Reino.

3.- ¡Oh benignidad de Dios que nos ha dado para nuestra salvación a su mismo Hijo! Y el Hijo se despojó de la apariencia divina para no deslumbrarnos con su fulgor; y por nosotros los hombres se encarnó y vino salvarnos y se manifestó.

4.- La gente le llamó Enmanuel, Dios con nosotros. Con nosotros estás Jesús en el Sacramento del Altar; con nosotros en nuestro corazón, porque te recibimos todos los días, con nosotros todo el día, porque siempre permaneces a nuestro lado. Seas por siempre bendito.

5.- Y ayúdame a difundir por todas las partes tu bondad y tu amor. La anchura, la largura y la profundidad de tu amor.