¡Desconcertado!

Estamos asistiendo, en los últimos tiempos en España, a una pérdida preocupante del equilibrio entre la libertad, el libertinaje y la falta de respeto a los valores de los otros, que puede deslizarse por un camino desaconsejado para todos, y que, de ninguna manera, son una propuesta de valores serios para los jóvenes y niños del presente.
Todos los grandes valores se sostienen en una cuerda floja, que necesita de mucho equilibrio para no deslizarse hacia un lado o hacia otro. En un extremo está la tiranía y en el otro la destrucción. Por ejemplo en los asuntos afectivos, un valor tan necesario para la vida y el crecimiento en un sano proceso psicológico, están la ausencia de afecto que genera niños traumatizados de por vida y predispuestos a la delincuencia, y los niños desbordados de afecto o super protegidos, que resultan incapaces de tomar decisiones personales y de ser realmente autónomos; son seres egoístas y caprichosos, poco leales y con tendencia a las dependencias.
Algo así estamos viviendo en este momento con respecto a los valores religiosos en nuestra sociedad. En un país como el nuestro, con tan larga tradición cristiana que se remonta a los primeros siglos de nuestra era, podemos pasarnos en exigencia religiosa, como ha sucedido en algunos momentos, hasta dar lugar a la santa inquisición, que de santa no tenía mucho, fruto de la pérdida de quilibrio o, por otro lado, como sucede hoy a una falta de respeto a lo religioso, en una sociedad que desea ser democrática y que no acaba de conseguirlo del todo. Díganme si no, qué explicación tienen los últimos acontecimientos que hemos vivido en España sobre la falta de respeto a los valores cristianos y a la gente que los profesa, que somos muchos.
La llamada "poetisa" Dolors Miquel, nos ha sorprendido, de manera burda y vulgar, con un padre nuestro de baja calidad literaria, barriobajero y malintencionado, en un momento en que se le concedía el "Premio Ciudad de Barcelona" ( Los premios , se supone, son para resaltar valores y poner como modelo de algo a la sociedad) Pues a esta "poetisa" sin gracia, ni categoria literaria, se le premia por esa vulgaridad para que los jóvenes y niños aprendan a escribir y a respetar los valores de los otros. ¡Desconcertado!
Estamos sistiendo en estos días al juicio contra Rita Maestre,que es, nada más y nada menos, que la protavoz del Ayuntamiento de Madrid, por haber asaltado la capilla de la universidad complutense al grito de "menos rosarios y más bolas chinas". Dice ahora que se siente arrepentida, y si es verdad, yo la perdono ahora mismo; mas me temo que todo esto forma parte ya de una manera de ser y de actuar que se está generalizando demasiado y que no va ser fácil detener. Todo un modelo de propuesta deformativa y de falta de respeto a los que no piensan igual -eso no es democracia- para nuestros niños y jóvenes. Para ser perdonado uno tiene que demostar que ha hecho de verdad "propósito de la enmienda" En los próximos meses lo sabremos.¡Desconcertado!
No hace mucho tiempo aún, un pretendido "artista" llamado Abel Azcona, se dedicó a robar (un delito) hostias consagradas, (algo de un inmenso valor para los cristianos porque son el mismo Jesucristo)mientras fingía que comulgaba, para hacer con ellas una exposición con la palabra "pederastia", incluso con el apoyo del ayuntamiento de Oviedo que le cedió el local para exponer tan deslumbrante obra de arte, que tal vez pase a la historia como las pirámides de Egipto o El Escorial. ¡Desconcertado!
¿Qué quieren que les diga? Que no; que algo nos está fallando democraticamente en este presente de nuestra historia y que la propuesta democrática que estamos haciendo a nuestros jóvenes y niños produce más inquietud que esperanza. Y lo produce porque no es democrática. Es de nuevo la pérdida del equilibrio del que hablábamos antes. Nunca, como ahora, la iglesia ha respetado la libertad para abrazar o no la fe; y nunca como ahora está recibiendo tantas faltas de respeto injustas, antidemocráticas. Porque esto no es algo neutral o intranscendente. Va creando escuela, que tal vez sea lo que algunos, disfrazados de demócratas, quieren para terminar imponiendo sus pretensiones dictatoriales. No voy a hablar de lo que está sucediendo en Siria. Algo que, en el fondo, empezó también así (Como en Sudán, como en Afaganistán,como en...)
¡Estoy desconcertado!
Yo voy a respetar a todos los que piensan distinto; y pido como contrapartida, que todos los que comparten la democracia, en la que vivimos, hagan lo mismo conmigo y con mis valores cristianos. Porque la ley del embudo no es democrática, y esto es lo que está pasando en la actualidad con algunas personas. ¡Permítanme que esté desconcertado!
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