Benedicto XVI consagrará 18 nuevas púrpuras en otoño Dos españoles serán cardenales en el próximo Consistorio

(Jesús Bastante).- El próximo mes de otoño, como adelantó RD, Benedicto XVI convocará un nuevo Consistorio en el que, previsiblemente, creará 18 nuevas púrpuras para alcanzar la cifra de 120 cardenales presentes en un hipotético cónclave. En el mismo, España estaría representada por los cardenales Rouco, Cañizares, Amigo, Sistach y García-Gasco, que perderá su condición de elector en febrero de 2011. Al menos dos de las nuevas púrpuras podrían ser españolas. Los arzobispos de Valencia, Carlos Osoro, y de Toledo, Braulio Rodríguez, son los principales candidatos, según ha podido saber este portal de fuentes vaticanas.

A favor de Osoro se encuentran varios factores: en primer lugar, que Valencia es la segunda diócesis de España y una de las más importantes de Europa. En segundo término, la vitalidad de la diócesis y su relevancia a nivel mundial en todos los aspectos: educativo, social, litúrgico y pastoral... y también como "cantera" de obispos. Finalmente, el hecho de que Gasco pierda su condición de elctor en febrero. El Consistorio sería en otoño, pero la "toma de posesión" se retrasaría hasta comienzos de 2011, lo que impediría que dos arzobispos de Valencia estuvieran en un hipotético cónclave.

Esta clave también sirve para Braulio Rodríguez. Su antecesor, Antonio Cañizares, está en Roma, y Francisco Álvarez ya no es elector. A su favor, además, el hecho de que Toledo sea sede cardenalicia ininterrumpida desde hace siglos. En su contra, su poco tiempo en la diócesis y su nula relevancia en el futuro de la Iglesia española.

Pensando en el futuro de la Iglesia en nuestro país -cuando el cardenal Rouco, que en agosto de 2011 cumple 75 años, pase a emérito-, toman fuerza, aunque con menos ímpetu, otros tres nombres: Juan José Asenjo, actual titular de Sevilla -entre los impedimentos, el hecho de que su antecesor, Carlos Amigo, tenga 76 y vaya a ser elector mucho tiempo, así como el reciente escándalo de Cajasur-; Ricardo Blázquez -reconocido por la Santa Sede por su trabajo con los Legionarios con la sede de Valladolid, que sin embargo no cuenta con impronta cardenalicia histórica-; y Julián Barrio, cuya designación podría ser un gran colofón al Año Santo. No obstante, la visita papal en noviembre ya supone un aldabonazo a su gestión, por lo que se antoja difícil que reciba la púrpura el mismo año.