¡Feliz domingo! Terminar la semana con música de Bach siempre es algo agradable (y empezarla también, claro está). Las transcripciones para piano de otras suyas para órgano nos ofrecen siempre una nueva perspectiva de esas composiciones.

La música de hoy, pues, es de Johann Sebastian Bach (1685-1750), compositor alemán nacido en Eisenach. Siempre existe la diatriba de si merece la pena conocer al Bach humano para apreciar más sus obras. Hay quien quiere conocer hasta el más mínimo detalle (lo cual a veces es muy complicado) de ese hombre cuya música nos emociona hasta lo más profundo de nuestro ser, o nos alegra hasta el tuétano. La obra musical de Bach es tan sublime que muchas veces tendemos a deificar de alguna forma al Bach persona humana o incluso imaginárnoslo como una especia de superhombre. Así, se escudriña cada rincón de los diversos escritos para ver si aparecen nuevos datos biográficos, escasos por otra parte, hasta el punto de que incluso una riña callejera de juventud nos parece un hecho hasta casi milagroso.

Disfrutaremos hoy del preludio coral Herr Jesu Christ, dich zu uns wend, BWV 632. El himno luterano en el que se basa, de autor desconocido, era habitualmente cantado justo en el momento en el que el ministro se dirigía a decir su sermón, y se implora a Dios que lo ayuda a tal tarea desde el púlpito. Este preludio coral pertenece al famoso Orgelbüchlein del maestro y Bach lo inicia mediante un arpegio ascendente en la voz intermedia que da lugar a una melodía que parece florecer como una flor en la primavera. Vamos a escuchar esta deliciosa pieza en la transcripción para piano del pianista alemán August Stradal (1860-1930).

La interpretación es de Angelika Nebel al piano.