¡Feliz domingo! En este primer domingo de junio suena aquí Bach con una obra de lo más desconocida. Puesto que estamos todavía por las obras para teclado (para clave principalmente) pasamos de algunas muy conocida e interpretadas asiduamente en los conciertos a otras que no lo son tanto pero que no dejan de contener ese germen bachiano. Lo hallamos tantos en sus magnas composiciones como en bomboncitos como el de hoy.

Seguimos recorriendo la biografía de Johann Sebastian Bach (1685-1750), compositor alemán nacido en Eisenach. Lo habíamos dejado en Ohrdruf, que se le había quedado pequeño porque quería seguir aprendiendo, terminar sus estudios en una escuela de latín y hacerse independiente. Su maestro en la localidad, Elias Herda, se habia graduado en Lüneburg por lo que, cuando se enteró de que el cantor de ahí, August Braun, necesitaba de cantores sin duda recomendó a Bach que marchase allí, cosa que hizo con su compañero Georg Erdmann. En abril de 1700 los tenemos allí y comenzaron sus actividades en el Domingo de Ramos de ese año. Concretamente cantaron en el llamado coro de maitines. En su obituario leemos que fue aceptado gracias a su bella voz de soprano, quizá recibiendo el encargo de cantar momentos solistas. El lugar en el que había recalado Bach era una de las escuelas más prestigiosas del norte de Alemania, en una ciudad de unos diez mil habitantes, algo grande para lo que él había conocido.

Vamos a escuchar una obra de título tan curioso como Praeludium et Partita del Tuono Terzo, BWV 833. En su momento se dudó de la autoría de la obra pero parece ser que sí es suya. Es una obra relativamente ambiciosa y tiene una estructura relativamente simétrica. El Praeludium está construido a base de imitación pero con un arte muy hábil. La Allemande que sigue se inspira en los movimientos similares de Krieger, con saltos interválicos y unas sorprendentes notas repetidas. Sigue una Courante que termina en modo menor y a ella le sucede la habitual Sarabande. Es muy curiosa porque tiene un Double (algo así como una variación) marcado allegro, lo que contrasta marcadamente con el ritmo lento de la danza. Termina esta curiosa suite con un Air que imita un aria italiana con sus respectivos ritornelos.

La partitura de la composición puedes descargarla aquí.

La interpretación es de Andrea Banaudi al clave.

1. Praeludium

2. Allemande

3. Courante

4. Sarabande

5. Double

6. Air