Bach, sonata para flauta BWV 1032

Bach, sonata para flauta BWV 1032

¡Feliz domingo! Seguimos recorriendo esas maravillosas sonatas para flauta y clave de Bach, algunas suyas con seguridad y otras no tanto. En cualquier caso, es cierto que los intérpretes las han hecho suyas si suelen escucharse frecuentemente en los auditorios.

J. S. Bach

Antes, como siempre, vamos con algo de la biografía de Johann Sebastian Bach (1685-1750), compositor alemán nacido en Eisenach y fallecido en Leipzig. Estamos ocupados con la Pasión Según San Mateo y podemos apreciar cómo Bach eligió hacer uso de todas las formas cultivadas en su tiempo, tanto con respecto a la música sacra como profana; ni siquiera se hacía algo similar en la ópera. La obra era tan colosal que puso en marcha todo el concepto de ciencia musical en él, tanto desde el punto de vista del material literario, como desde la imagen simbólica y afectiva, como todo el contenido teológico que una obra así requería; de todo hizo el uso más óptimo. El texto de Picander es el que da estabilidad a todo, tanto desde el punto de vista tonal como modal.

Hablamos de la Pasión porque es lo que toca según la biografía de Bach pero el orden del catálogo BWV que seguimos nos lleva a la Sonata para flauta en la mayor, BWV 1032. El clave no es un mero instrumento del continuo sino un compañero al igual que la flauta. El primer movimiento es un Vivace y comienza con una introducción para el clave sola y luego la flauta aparece con su propio material. El movimiento lento es un Largo e dolce, y contiene una bella aria de la flauta, con el clave o bien haciéndose eco o presentando un acompañamiento casi sin descanso. Termina la composición con el tercer movimiento, un Allegro, es similar al primero en cuanto al material pero la melodía es algo más contenida y adornada con una intensa pulsión rítmica.

La partitura de la pieza puede descargarse aquí.

La interpretación es de Marten Root (flauta) y Menno van Delft (clave).

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