Bach, suite BWV 821

Bach, suite BWV 821

¡Feliz domingo! Otra semana de Cuaresma que empezamos hoy, litúrgicamente hablando. Lo haremos con la música de Bach, tan profunda que yo creo que no somos capaces de apreciarla en toda su amplitud. Sin embargo, su escucha sosegada es algo que nos permite ir descubriéndolo poco a poco, con tranquilidad y saboreándola como sabe el mejor vino que podamos adquirir.

J. S. Bach

Primero, algún dato de Johann Sebastian Bach (1685-1750), compositor alemán nacido en Eisenach. Bach se graduó en la escuela en 1694, algo antes que otros hermanos porque entró directamente en la clase de quinta debido a sus capacidades. Su profesor de ese año fue Johann Christoph Juncker y sabemos que el joven aprendió ese año el catecismo de Lutero, los salmos, así como escritura y lectura y ejercicios gramaticales de alemán y latín. Esta última lengua era la base de la enseñanza en la escuela pero parece que a Bach no se le daba demasiado bien. Ese año se quedó en el puesto veintitrés de entre todos los alumnos y bajó aún más otros lugares porque sus madres se murieron con una diferencia de nueve meses. Pero la cosa pudo contenerse porque uno de los profesores era Andreas Christian Dedekind, amigo personal de la familia. Dedekind actuó de alguna forma como mentor y acompañante de Sebastian y Jacob, los pequeños que se quedaron huérfanos y que, poco después tendrían que abandonar Eisenach porque en el pueblo se habían quedado ya sin futuro.

De Bach vamos a escuchar la Suite en si bemol mayor, BWV 821. Bueno, de nuevo aparece una obra que se ha mantenido en el catálogo BWV para que no haya huecos pero que parece ser que no es original de Bach. No por cuestiones estilísticas sino porque la única versión proviene de una fuente algo dudosa. Está formada por tres movimientos de danza enmarcados por un preludio y un eco. Precisamente, la allemande que sigue al praeludium inicial cita a este y hay una fuerte vinculación entre ambos. Algo similar pasa con la courante, que esté relacionada, al menos armónicamente, con el movimiento anterior. La sarabande tiene un molde mucho más francés con un comienzo imitativo algo peculiar. Termina la suite con un echo que se abre con un motivo similar al de la sarabande. El movimiento es una rareza dentro de la música para clave de Bach pero que directamente se relaciona con las obras para órgano tanto alemanas como holandesas.

La partitura de la suite puedes descargarla aquí.

La interpretación es de Violaine Cochard al clave.

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