¡Feliz domingo! Llegamos a ese día especial en el que disfrutamos de la música de Bach; aquí, por supuesto, porque seguro que a lo largo de la semana se escucha bastante más. Su música siempre es profunda, como un pozo, que nos devuelve el sonido de la piedra que cae en él de una forma más enriquecida. La música para laúd que estamos escuchando ahora es especial para esta profundidad.

Empecemos con algo sobre la biografía de Johann Sebastian Bach (1685-1750), compositor alemán nacido en Eisenach y fallecido en Leipzig. Parece ser que alrededor de 1722 Bach estaba descontento con su papel en Cöthen. El príncipe tenía problemas de salud y también financieros y el maestro decidió probar fortuna en otro lugar. Había un puesto vacante en Leipzig que le fue ofrecido a Telemann pero este lo rechazó después de tres meses de prueba. Es probable que este pasase por Cöthen para visitar a Bach y a su ahijado. Así, supo de primera mano que Telemann había rechazado el puesto. ¿Es posible que este le animase para ser él quien ocupase la plaza de Leipzig? En cualquier caso, ya Bach tenía en mente su marcha de Cöthen y está claro que la balanza se inclinaba por Leipzig, como ya sabemos que finalmente ocurrió.

Disfrutemos de su Suite para laúd en do menor, BWV 997, también conocida como Partita. De nuevo hay cierta controversia sobre el tipo de instrumento para el que la obra fue compuesta aunque esta parece bastante adecuada para el laúd y parece que fue compuesta desde cero, sin presentar arreglos de otros movimientos. Empieza con un Preludio a dos voces, florido y flexible pero nada dado a la improvisación porque Bach lo escribió todo. Le sigue una Fuga escrita en forma da capo y con un sujeto muy conseguido, cada vez ganando en tensión. Viene luego una Sarabande dividida en dos mitades iguales. Termina la obra con una Gigue y su Double (variación), tomando el protagonismo final el ritmo acompañado de una armonía muy típica de Bach.

La partitura de la pieza puede descargarse aquí.

La interpretación es de Evangelina Moscardi el laúd.