Bach, suite francesa BWV 817

Bach, suite francesa BWV 817

¡Feliz domingo! Creo que no me equivoco si afirmo que recorrer y escuchar el catálogo completo de las obras de Bach es una de las cosas más recompensantes que puedas hacer, si te gusta su música claro. Además, casi en cada una de ellas encontramos siempre algún aspecto nuevo, a modo de caleidoscopio que nos regala multitud de facetas. Por ello, creo que puede ser excelente idea ir disfrutándolas cada domingo aquí, con tranquilidad y sosiego.

Eisenach

Vamos, como siempre, con algo de la biografía de Johann Sebastian Bach (1685-1750), compositor alemán nacido en Eisenach. La vida del pequeño Bach se desarrolló entre los cuatro elementos más importantes de la vida alemana de la época: lo municipal, lo cortesano, lo escolar y lo religioso. Esos cuatro aspectos influyeron no solo en el Bach maduro sino en el joven. Efectivamente, en Eisenach es muy posible que comenzase a participar y admirar los conjuntos municipales que tocaban en diversas ocasiones del pueblo. Seguramente también disfrutaría contemplando la capilla municipal de la corte, de la que hacía uso los patrones. En la escuela de latín de San Jorque había un chorus musicus y era la primera etapa de la formación musical de los jóvenes de Eisenach que comenzasen sus estudios. Finalmente, tenemos el propio templo en el que se bautizó el maestro, la iglesia de San Jorge, con su órgano y la tribuna alta para el coro, centro fundamental de la música religiosa en la localidad de Turingia.

Nos toca hoy terminar con la serie de suites francesas con la suite francesa n.º 6 en mi mayor, BWV 817. Está formada por ocho movimientos, siendo el primero una allemande, en estilo alemán y con figuras repetidas de la mano izquierda que a veces rompen en arpegios. La courante es animada y tiene una melodía casi que no se acaba, acompañada de un bello contrapunto. De nuevo, la emoción viene con la sarabande, permitiendo al intérprete un amplio uso de la ornamentación. Le sigue la gavotte, casi en forma de marcha y luego una polonaise, una novedad entre las suites francesas, con una figura rítmica que luego Chopin desarrollaría más tarde. El minuet que viene a continuación es contenido y explota algo en la bourée que le sigue, con un intenso ritmo en la mano izquierda. La suite termina de forma francesa con la gigue, llena de movimiento perpetuo, de ritmo endiablado y de la típica luminosidad final.

La partitura de la obra puedes descargarla aquí.

La interpretación es de Chiara Massini al clave.

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