A este santo inglés está dedicada la cantiga n.º 288 que vamos a escuchar hoy. Como todas las de la colección, pertenece a las Cantigas de Santa María del rey Alfonso X el Sabio. El título es A Madre de Jesú-Cristo, vedes a quen aparece.

Contamos con una pequeña introducción para ella: Como un hóme bõo de relijôn foi veer a igreja u jazía o córpo de Sant' Agostín, e viu i de noite Santa María e grandes córos d' ángeos que cantavan ant' ela. Un monje nativo de Canterbury (a veces identificado con san Dunstán) vivía virtuosamente y era un gran devoto de la Virgen. Mientras visitaba la tumba de san Agustín se postró en la capila de la Virgen. La Señora se le apareció acompañada de muchjps santos que cantaban alabanzas. Las vírgenes también cantaban y la alababan. El monje fue testigo de todo ello y dio gracias a Dios y llegó a tener una vida dichosa.

Clicando en este enlace puede encontrarse más información sobre esta cantiga.

La versión es de Eduardo Paniagua.