¡Feliz miércoles! La obra de hoy proviene de un maestro de uno de los apellidos más ilustres de la Historia de la Música (todo con mayúsculas). Afortunadamente, cada uno se sus miembros se van recuperando poco a poco y sus músicas van sonando mucho más.

Hoy nos visita Johann Michael Bach (1648-1694), compositor alemán nacido en Arnstadt. Fue el padre de María Bárbara Bach quien luego sería esposa de Johann Sebastian. Su padre, Heinrich, fue quien le dio las primeras lecciones de música, enseñándole a apreciar la música vocal. En 1665 se hizo cargo del puesto de organista de la capilla del castillo de Arnstadt, que había ocupado su hermano. En 1673 pasó a Gehren donde incluso llegó a construir algunos órganos. Su música no es demasiado conocida a pesar de que era uno de los compositores más apreciados de su tiempo y se conservan en buena cantidad a pesar de ser un Bach «menor». Sus obras han sido muy alabadas gracias a su estilo natural, siempre bien elaboradas y mostrando una gran influencia de Heinrich Schütz.

Disfrutemos de su motete Halt, was du hast, a ocho voces. Utiliza dos textos, uno para cada coro, siendo el de uno Jesu, meine Freude armonizado a cuatro voces. En la segunda parte del motete los dos coros hacen uso del eco. Es una imponente meditación sobre el abandono de las cosas mundanas y la entrega a los brazos de Dios. El arte y la finura de Bach están presentes en esta bellísima obra.

La partitura de la pieza puede descargarse aquí.

La interpretación es de Vox Luminis dirigido por Lionel Meunier.