Motete de la paz

Jubilate Deo, Lully

¡Feliz viernes! Sigamos pidiendo por la paz, que nunca será poca. No solo para el mundo y sus países sino también en nuestros hogares y para nosotros mismos. La música siempre ha sido una buena consejera para ello. Hoy vamos a contribuir con una gran obra.

J-B Lully

Hoy disfrutaremos de la música de Jean-Baptiste Lully (1632-1687), compositor francés de origen italiano nacido (con nombre Giovanni Battista Lulli) en Florencia. Desde su llegada a la corte se dio cuenta de que sacaba el mayor provecho de todo y le iba mejor si iba según la corriente que Luis XIV le marcaba. Que el rey quería reírse, Lully le componía algo cómico; que el rey se sentía languidecer por el amor, Lully le componía un ballet sobre el enamoramiento; y así sucesivamente. A veces las intenciones del monarca era separarse de la tradición clásica para no verse como otro Apolo sino como era él mismo. Para ello tenía Lully un arma poderosa: sus imponentes tragedias líricas. Es evidente que así consiguió el favor del rey, hasta que fue nombrado superintendente de su música.

Vamos a escuchar su motete Jubilate Deo omnis terra, LWV 77. Es uno de los doce motetes suyos que se conservan. Este fue compuesto en 1660 tras la firma del Tratado de los Pirineos, que ponía fin a la guerra franco-española. Igualmente esa paz trajo consigo, en años sucesivos, la boda del rey, el nacimiento del delfín y otras cosas. Tiene forma de gran motete, que era la idea de música francesa que el propio rey tenía en mente para rivalizar con la italiana. Escuchamos una impresionante obra a base de momentos solistas y otros para todo el conjunto, algo también característico de este tipo de piezas, que ponía marcha todo el arsenal musical que Lully tenía a su disposición.

La interpretación es de La Capella Reial de Catalunya dirigida por Jordi Savall.

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