¡Feliz viernes! Esta oración bíblica siempre se ha cantado (y se reza) en la hora canónica de completas. Muchos maestros se han fijado en ella para componer músicas serenas y llenas de nostalgia. Esto lo han hecho especialmente los maestros ingleses.

Hoy nos visita Orlando Gibbons (1583-1625), compositor inglés nacido en Oxford. En 1606 se doctoró en música en Cambridge. Durante cierto tiempo se dijo que había recibido otro en Oxford en 1622 pero hoy día hay alguna duda. En el funeral por Jacobo I en 1625 Gibbons aparece como organista de la Capilla Real y como instrumentista privado; igualmente aparece como organista de la abadía de Westminster. En 1625 cayó enfermo y los médicos reales fueron convocados temiendo que hubiese una epidemia. Los galenos dijeron había entrado en coma debido a una hemorragia cerebral. Tras su muerte se colocó una placa en la catedral de Canterbury así como un busto del compositor. Su hijo Christopher recibió una beca en Charterhouse gracias a la herencia de su padre.

Escuchemos su bello y sereno Nunc Dimittis. Es una composición a cuatro voces que tiene todo ese sabor inglés tan característico. Prácticamente es una obra homofónica con las cadencias finales en sutil polifonía. Esta se pone más de manifiesto en el la doxología final, especialmente en el amén. La obra forma parte, junto con un magníficat del llamado Short Service. Una maravilla llena de delicadeza.

La partitura de la pieza puede descargarse aquí.

La interpretación es de Voces 8.